Este viento frió, penetra despacito en el alma hasta los cerros se apenan cuando cantan su agonía. Como no he de entristecer si agoniza el querer de mi vida. Y estos versos se agigantan aferrados a los cerros, asi se aferra mi amor cuando agoniza el calor de tu pecho.
Texto agregado el 17-09-2006, y leído por 147 visitantes. (0 votos)