Veo el Pesebre: María, José y... ese Niño... Pienso en cada Navidad vivida superficialmente y hoy... el recuerdo de tantas miradas que cambiaron mi visión.
Jesús sigue ahí.
Intentando seguir sus pasos, mi Navidad intenta ser sinónimo de ENTREGA, en todos los sentidos...
Hay algo que distrae mi atención... el arbolito lleno de "papá Noeles". El rojo de su vestimenta pide a gritos que lo mire. Pero ese Niñito... Su inocencia y el futuro que le espera...
Me encuentro diciéndole a una de esas tantas miradas, una de 7 años: "¡Qué bueno que Papá Noel sepa lo que queremos!", mientras no logro sacar de mí la imagen de ese Niñito que realmente sabe lo que queremos y que cada día da TODO por nosotros, se da Él por entero. Pensar que nació como uno de nosotros y a diferencia de Él nos cuesta tanto desprendernos de las cosas...