- Me parece que me voy a Pehuajó
- Si ya fuiste la semana pasada y me dijiste que Gómez no va a tener novedades antes de un mes ! Qué te anda pasando a vos ? Estás raro …
- Mmmmm … mirá, en un viaje conocí a una señora … - bajó la vista.
- Ah, noooo. Eso era lo que me faltaba oír. Por eso tanto ir ! Si tendría que haberme dado cuenta. Estúpida soy, estúpida.

……..

El tren llegó un poco atrasado. Pocos pasajeros esperaban, y en cuanto se detuvo, subieron enseguida.
Un hombre permanecía quieto a menos de un metro de la formación, frente a una de las puertas de acceso. Era evidente la intención de abordarlo, pero también que algo le impedía completar el gesto.

…….

Matilde empezó a preocuparse. Su asiento ( y el vacío que esperaba a Mariano ) estaba al lado opuesto del andén, así que decidió levantarse y apoyando una rodilla en uno libre, se esforzó por ver a la distancia a través del vidrio fijo del coche pullman, en ambas direcciones. En una de esas lo distinguió frente a la puerta del otro coche pullman. Corrió hacia la puerta del vagón, y asomando medio cuerpo

……..

Habían concertado encontrarse en el mismo tren. Ella partiría desde Chivilcoy, él abordaría en 9 de Julio, para llegar juntos a Pehuajó. Les pareció muy romántico hacerlo de ese modo. Era como entrar ambos con el pié derecho y simultáneamente a una nueva vida.

…….

Sería todo lo que fuera, pero no podía dejarlo marchar así, dejando caer los brazos. No.
Se cambió los zapatos y caminó a paso rápido hasta la estación. Tomó un atajo, que la condujo a uno de los extremos del andén, y ya desde allí lo vió, parecía indeciso, el único pasajero que aún estaba allí . El corazón le latió alocadamente: no había subido aún !
Entonces

…….

- Mariano !!!
El grito fue un dúo casi perfecto.
En un instante pasó por su mente la intimidad de fuego, pero también la mucha historia ( donde el placer no estaba ausente, claro ); el espíritu chispeante, pero también la serenidad, la firmeza, la ternura. La emoción a flor de piel, y la emoción como acto más íntimo y recogido. Y sintió los años y supo que entre lo por nacer y lo que ya tiene una fisonomía, en algunos casos, en este caso, quería darle chance a lo conocido.

…….

- Esperá …
- Y todos los planes ? El galpón nuevo, arreglar los alambrados … claro, ya me doy cuenta. Por eso es que ni los precios averiguaste. Me dejaste todo a mí. A vos no te interesa para nada.
- No es así. Me interesa y mucho. Acaso no te escuché todo lo que fuiste averiguando ? Y no te dije mi opinión ?
- A ver, decime qué pensás hacer.
- Estoy metido en un lío.
- Es casada ?
- Si
- O sea que ustedes dos deciden por los cuatro.
- Mirá – prosiguió – vos hacé lo que quieras. Yo acepto lo que vos decidas, porque yo te amo. Pero si te vas, no vuelvas nunca, porque no me vas a encontrar.