Cuando junto las semillas en el costal,
cuando creo que no volverán a salir,
cuando creo en el verano que ha de venir
y me encuentro encarcelado en mi soledad.

Cuando veo que el cielo tiñe de rojo
las poesias y la suerte del despertar
atrapado en la frescura de tu mirar
veo al tiempo jugando a su antojo

Y vuelan las cosas por la ventana,
el circo, los lápices, el abandono.
La niña que atrapa nostalgias que ha de lucir,
y me las muestra contando gaviotas pasadas.

El tiempo marca el eterno abandono,
la línea del fuego de las palabras,
ancladas que surjen siempre a su antojo,
las que intento terminar de extinguir.

Y no encuentro la forma de completar
lo que añoro, y no puedo dejar de seguir
eso que existe y late, no es un capricho,
no es una causa perdida en mi corazón.

Y vuelan las cosas por la ventana,
el circo, los lápices, el abandono.
La niña que atrapa nostalgias que ha de lucir,
y me las muestra contando gaviotas pasadas.