De la Serie para Liza (II)
Poema para Liza

Ausencia será por toda la eternidad, lo que sentirá tu corazón,

desde que él se fue... desde que él se negó a luchar por éste amor.

¡...Desde que él renunció a tus palabras de razón...!

Más el amanecer llega día a día, aunque no miremos la luz del Sol...

aunque esté nublado el cielo profundo... aunque esté pintado de gris el color.

¡...Desde que él renunció a tus sabores de pasión...!

La oscuridad que sientes no está afuera, sino dentro de tu alma resentida...

no necesitas ver la luz del Sol... dentro de ti tú tienes tu propio Cielo.

¡...Desde que él renunció a tus cadenas de dulzura...!

Ese tu cielo azul, limpio y sin tormentos,

y allí tú tienes tu propio Sol... y allí tú tienes tu propia Luz... y allí tú tienes tu propia Luna.

¡...Desde que él renunció a tus locuras de amor...!

Esa es tu propia Vida, eso es lo que siempre hubo...

antes, durante y después de él... tu propio amor, tu propia entrega, tu propia vida.

¡...Desde que él renunció a tus ojos de color raro...!

Lo que él se llevó, se fue para no volver...

lo que guardas dentro de ti, puede volver a nacer...

sólo déjalo revivir, déjalo crecer, déjalo florecer...

y pronto veras tu Luz brillar, sin Sol, sin Luna, sin Él...

Sólo tu Alma que resplandecerá... con Locura... sin Sol, sin Luna, sin Él.

9 de Mayo del 2006