Llega sólo Sin invitación Entra y limpia nuestra alma mustia. Nos descontamina Purifica nuestro yo Se lleva la rabia de paseo bien lejos. Es necesario respetar sus procesos Sus tiempos Hay que comprenderlo. Trae consigo un gran alivio Nos sentimos livianos Hasta podemos flotar. Después del perdón Llega la paz a nuestra vida. Dejamos escapar al miedo. Reconocemos nuestras propias caídas e invitamos al otro A re-cons-truir. ©® Carolina Aldunce
Texto agregado el 08-09-2006, y leído por 119 visitantes. (2 votos)