A veces crudos,otras tiernos.En fín.Los relatos que comparto,son todos tomados de mi realidad.


Mañana viene Juancito... ¡ A tomarse un ansiolítico!


Y si, al principio lo invitaba con alegría. Bueno, digamos con esa alegría de la “buena acción”, esa para que Dios ponga en nuestro inventario.
No era fácil, pero entonces yo tenía menos mañas, mas energía, mas ganas, menos años.

Me acuerdo cuando entró a la oficina por aquel Decreto de tomar empleados con capacidades diferentes. ( Como le pusieron después).
Yo era Jefa de Sección, cuando Fortuny, mi Superior, entró sonriente con él.

_¡ Bueno!.Les presento a un nuevo compañero. Juan Manuel de la Fontana.

Me puse contenta de tener una cara nueva. Claro, no sabía.

Juancito entró alegre, protocolar, vestido de hombre.
Mientras mis compañeros lo saludaban, Fortuny se apuró a mi escritorio y con su ironía usual, me dijo.

_Flaca.Apuntalo.Tiene 27 años pero su coeficiente es de un pibe de diez. Tuvo meningitis, creo. ¡ Que te sea leve!.
Y se fue.

Pasaron los días. Se me pegó fiel como un perro. En fin, una historia larga de contar. Se ganó el cariño de todos, pero las bromas no podían evitarse. Y como única mujer, me costaba poner límites.
Horacio lo usaba de “Che pibe”.

_Che, Juancito.Andá a comprarme un paquete de puchos.
_Che, Juan.Vos que sos un tipo piola.¿ Me preparás un cafecito?

Los otros le sacaban charla. Entre curiosidad, compasión, ternura y las burlas inevitables a veces. El peor era el Cordobés.

_Juancito. ¿Y vos tení novia?

Él intentaba responder a su misma altura. La suerte le había dado un tío inteligente que, sabiendo cómo se mueven las hormonas en esos chicos, le había sacado un Bono en una Casa de “masajes”. Y ahí, Juancito la ponía una vez por semana y se sosegaba.

_Sí pibe. Tengo novia. ¡Pero casarme, ni pienso!.Se llama Susy.

_Y dale che. Contá. ¿Qué te hace la Susy?

Juan se ponía nervioso.
_¡Esas cosas no se cuentan en presencia de una dama!. (La dama era yo).

_¡Pero no seas cagón Che!.¿No ves que la Jefa está ocupada?.¡Qui ti va a escuchá!.Dale que acá somo todo macho. (Le decía con su cantito). ¿A la Susy la conocés del quilombo?.

Juan se enojaba de veras. La respetaba.
_¿ Qué quilombo forro?.¡Es una masajista!.
El cordobés le hacía un guiño cómplice y él se reía.
_¿Pero se la ponés o no?.

Juan me miraba de reojo. Yo me hacía la ausente. Entonces se prendía.

_¿Y cuándo vivíai en el campo y no se la poníai a la Susy?.¿Qué carajo hacías?.¿Te culiaba una oveja?
Él no se animaba pero le tentaba hablar. Volvía a mirarme y yo tipeaba cualquier cosa. Entonces recuperaba la confianza ¡Y le contestaba que sí!.
Hasta hoy me pregunto si eso es real o leyenda pura.
Y la Barra Brava de la oficina, seguía arremetiendo.

Pasaron los años. Trabajando era metódico, obsesivo. Escribiendo notas a máquina, era el mejor. Yo tenía que hacerle un borrador exacto. Con puntuación, espacios, tal como quería la carta. Él no analizaba, no suponía, no creaba. Copiaba textualmente.

También se le daba por componer canciones. Cuando le pasaba algo especial, lo escribía como carta y después, lo acomodaba a una melodía que tenía grabada en la cabeza vaya a saber de qué y desde cuándo. Era un tarareo monocorde que no pasaba de tres notas musicales. Un tic monótono, constante. Lo hacía cuando leía, cuando escribía, cuando no tenía nada que hacer. ¡ Siempre !.
Y la barra brava lo incentivaba. Lo aplaudían, se cagaban de risa. Pero lo querían.

Aprendí a quererlo, a comprenderlo y a aguantarlo-a qué mentir-. Le di todo lo que pude y se me pegó como abrojo.

Mañana viene Juancito... ¡ A tomarse un ansiolítico!

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Religiosamente, lo invitaba cada año a pasar unos días en casa. ¡Pero hoy tiene cuarenta!.Y más mañas, más euforia, mas compulsión... ¡ Y más tarareo!


Llegó exaltado como siempre, con un bolso gigante.
_¿Qué te trajiste ahí?

_¡Te traje todos los regalos que me hicieron para mi cumpleaños!.-dijo feliz-

_¡Uy!.¡Yo no te compré nada!

_¡No importa nena!. No hay que gastar. ¡Hoy no se puede!.¡Todo sale un ojo de la cara!

Los viejos le pusieron límites desde chico. Pero no límites sanos, límites represores, castradores. Algo así como_No toques. No hables. No gastes.-a mi intuición, ¡No nos jodas!.

Puso todos los paquetes sobre la mesa.

_Vení que te muestro Manu. (Me llama así por mi sobrenombre, pero no voy a escribirlo)
_Esta lapicera, me la regaló papá. No es cara. Pero a mi no me importa. ¡No se puede hoy!.¡Todo un ojo de la cara!.
_Esta libreta mamá. Es chiquita pero yo le dije que está bien. ¿No Manu?.¿Para qué quiero más grande?.Más grande sale caro. ¡Y hoy no se puede vieja!.¡Todo cuesta un ojo de la cara!.
_Mi hermana me dijo. Juancito, elegite una remera. ¡Y yo me elegí ésta!.Diez pesos. ¿Está bien , no Manu?.¿Para qué gastar más?.¡Hoy no se puede!...

_¡Sí Juan!.¡Ya sé!.¡Un ojo de la cara!.

Me abrumaba, me palmaba.

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No me es fácil llenar tiempos con él. Me inventaba juegos, pero el del programa de Radio ya me aburría. Nos sentábamos con una gaseosa y el grabador.

_ Bueno.Dale.Ahora yo te presento y vos empezás a hablar. Lo que quieras. Y después cantás. ¿Dale?.Y te regalo el cassete y lo escuchás en el campo.¡ Le ponemos propagandas y todo !.
Ese juego le fascinaba. ¡Se lo creía!
Entonces ponía mi mejor voluntad y la grabadora.Me inventaba voz de locutora.

_Y bien. Querido público oyente. Hoy tenemos en nuestro Estudio, al Señor Juan...

_¿En qué Estudio Nena?-decía tratando de hablar bajo.

Stop.

_Salame.Se dice así. ¡Estudio!.¿No ves que estamos en un Estudio de Radio?.¡Ahora tenemos que empezar todo de nuevo!.Vos dejame a mí. Y me seguís.

Rec.

_Y bien. Hoy tenemos en nuestro Estudio al popular cantautor...

_¿Canta qué dijiste?

Decidí no cortar y seguí. Empiezo a bromear. Él se ríe fuerte, se exalta, se pone rojo, tose.
_......que nos va a deleitar con su canción”Susy”.

Le hago un gestito para que empiece.

_Ananananananana.Susy. yy.yy.yy.Ananananana, ungunungun, uun. Uuun. Teconocienlacasade... anananananananana masajes.eee.eee.eeess.ungunungun, uun, Uuun..........

_Che. ¡Qué buen tema!.¡Es música árabe!

Se interrumpe.
_¿Y eso qué es nena?.
Le hago gesto de que seguimos en el aire.
_Como las canciones de Shakira.
Se ríe a carcajadas, se atraganta. Y ni puta idea de qué es Shakira.

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Al segundo día, ya no sé qué inventar para mantenerlo ocupado.

_¿ Querés ver tele?

_No. ¡Son todas porquerías las que hay!.Allá en el campo, papá y mamá dicen lo mismo. Por eso no vemos mucho. Y es mejor. ¿Sabés cuánto nos vino de luz?
(¡Qué me importa!)-pienso. Pero él la sigue.

_¡Es un afano!-se irrita- _¡No se puede hoy!.¡Todo sale...!......

_¡Sí!.¡Ya sé Juancito!.¡ No me rompas más las pelotas con el ojo de la cara!
Se enoja. Me mira bufando de costado. Atina un _Bueno che.
Pero me come la paciencia. Y el amor que le tengo, se me va a un segundo plano.

_¿Querés leer?-le pregunto medio sacada.

_¿Y qué?

_El Diario.A vos te encanta el Diario.-confío en mi “a vos te encanta”.

_Bueno.Sí.Dame que quiero leer una cosa.

Se pone serio, como interesado. Empieza a leer.

_ Ananananananana.Susy. yy.yy.yy.Ananananana, ungunungun, uun. Uuun. ¡Pero mirá qué dice acá!.¡Es de no creer!

¡A la mierda!-le sigo el clima._ ¿Qué dice?

Pero Juancito no comenta, no resume. Lee.Y aunque no entienda, enfatiza para hacer que sabe.
En tono monocorde habla.
_”El salario mínimo, se in... incrementará de 630 a 760 pesos a partir de los haberes de Agosto, se elevará a 780 desde Septiembre y finalmente, ningún em... empleador podrá pagar a su personal, menos de 800 pesos-en bruto-...

Me mira curioso, pero como no hago comentarios sigue.
_En bruto dice.

_Sí, se dice así.

Antes que me lea la página entera, le digo un_¡Ajá!

¿Viste?-responde orgulloso. ¡Chupate esta mandarina!

_¿Y entendiste lo que dice?.

_¡Y claro nena!. Bueno,... Todo todo no.

Llega el tercer día.

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_ Che, Manu. ¿Me prestás el teléfono para llamar al cordobés?

_Bueno, llamalo. Pero a mí no me pases eh.

_¿Y si me pide?

_Le decís que no estoy.



_¡Hola!.Si.Yo.Acá, en lo de “mi” jefa. ¡Ah sí!.¡Mirá vos!-y en ese “mirá vos”, gira la cabeza para hacerme partícipe de la charla.
Le hago un gesto de no me metas y me dice en voz baja-que siempre es alta-. _Dice que trabaja de Encargado en el edificio donde vive...

_Shhhh, ¡Callate!.

La charla es monotemática. A los dos minutos me dice otra vez.

_Quiere que te pase.

Me caliento.
_¿No te dije que no estoy?-susurro.
Vuelve al diálogo.
_No.Manu me dice que no está.

Es obvio que el cordobés se empieza a reír e insiste. Casi puedo adivinarlo.

_Che.No sea huevón. ¿Cómo mierda ti va a decí que no está, si no está?.¡Pasámela!

Pero Juan no es tan gil. Me mira. Lo acribillo con los ojos. Sale mas o menos bien.
_A ver. Esperate un cacho que me parece que viene.

Y claro, tengo que venir o venir y comerme las gastadas del Cordobés.

_¡Te lo tenés adiestrado eh!-me dice muerto de risa.

_Ya sabés-le contesto. _Me pide el teléfono cien veces y me anda pasando con todos. No sabía que estaba hablando con vos.



El día se hace largo. Tengo que hacer cosas de rutina. Él va y viene.
__Ananananananana.Susy. yy.yy.yy.Ananananana, ungunungun, uun. Uuun. Teconocienlacasade... anananananananana masajes.eee.eee.eeess.ungunungun, uun, Uuun..........
_Manu. ¿Me prestás el teléfono para llamarlo a Horacio?

_¿Para qué lo vas a llamar a Horacio?.

Se molesta.
_Para ver cómo está.

_¿Y qué te importa cómo está?.No fue buen amigo con vos.
Se va con el pensamiento al Pasado.
_Sí.Tenés razón. ¡Era una basura!.

Me distiendo un segundo.

__Ananananananana.Susy. yy.yy.yy.Ananananana, ungunungun, uun. Uuun. Teconocienlacasade... anananananananana masajes.eee.eee.eeess.ungunungun, uun, Uuun..........

Va y viene. Va y viene.

_Tenés razón Manu.Mejor la llamo a Carmen. (Me manipula sutilmente)

_¡Bueno!. ¡Llamala a Carmen!.Pero hacela corta que si llaman va a dar ocupado.
Me sirvo un café y un cuarto de ansiolítico.

_¡Hola!.Si.Yo.Acá, en lo de “mi” jefa. ¡Ah sí!.¡Mirá vos!-y en ese “mirá vos”, gira la cabeza para hacerme partícipe de la charla.
Tapando el tubo sin sentido, grita.
_Che Manu. ¡Dice que se separó!
Lo miro mal. Habla un minuto más.
_Me dice que te pase.
El cuarto de ansiolítico, todavía no me hace efecto.

_Me pide el teléfono cien veces y me anda pasando con todos. No sabía que estaba hablando con vos. (Miento el mismo discurso).

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Hoy se va. Cuesta decirlo, pero Día de Gloria.Estoy acelerada, cansada.
Tengo el __Ananananananana.Susy. yy.yy.yy.Ananananana, ungunungun, uun. Uuun. ,incrustado en el cerebro. Llamó por teléfono diecinueve veces en dos días. Me banqué el_Quiere que te pase , diecinueve veces. Con el cordobés, con Carmen, María Rosa, Susana, mi ex Jefe, el Nene, Lautaro y los que siguen.
Por suerte, hoy se va. Aprovecha a hacer todo lo que “mamá y papá” no lo dejan hacer en el campo.

Y lo sabe. Por eso me pregunta medio en falta.
_Manu. ¿Lo puedo llamar a Marcelo?.

Má sí. Llamalo.Con tal de que me deje en paz un minuto.
Pero no puedo dejar de decirle.
_¡Diecinueve llamados hiciste!.¿En tu casa te dejan?.El teléfono acá ¡También sale un ojo de la cara!.¿Sabés?.

Cuando se enoja, se le desvía la vista. Camina medio torcido. Bufa.

_¡Qué te enojás!.¡Tengo razón!

Baja los decibeles.
_Bueno, sí. Pero le pregunto si puedo ir a visitarlo un rato antes de irme.

Eso me gusta, aunque conozco las respuestas del otro lado.

_Hola Marce.Si, otra vez yo. Escuchame. ¿Qué te parece si voy a visitarte un rato que hoy me voy?.Ah...! Sí, sí. Claro.A ver. Esperá que le pregunto.
_Me pregunta Marcelo, si en vez de que vaya yo, puede venir él para acá con la esposa y los chicos. (¡Y me lo dice feliz!).¡Todo al aire me lo pregunta!
Y pierdo el control. Lo miro con bronca y no contesto. Entonces le dice que sí, que vengan.

Cuando corta se queda callado. Sabe. Él sabe.

_¿Me podés decir por qué mierda le dijiste que venga?.¡Hace veinte años que no lo veo!.¡Ni me acuerdo de la cara!.¡Con la mujer y los chicos!.¡A joder acá! ¿Por qué en la casa de él no?-lo ironizo.

Se descoloca y me grita.
_¡Porque no puede!.¡Porque justo tenía que salirrrrrrr!

_Bueno.Si tenían que salir ¡Te vas con ellos a dónde tenían que salir!.¿Me entendiste?.¡Sos un boludo!

No nos hablamos más hasta que suena el timbre. Él sale corriendo, no me da tiempo a abrir. Quiere abrir la puerta de rejas con las manos. Le grito que se va a trabar, que abre con el control remoto.
Se sulfura. Vuelve a gritarme.
_¡Pero están ahí nena!.¡Abrí la puerta!.

_¡Abrí la puerta una goma! ¿Me entendés?.¡A mí no me levantes la voz! ¿Sabés qué?.¡Me tenés podrida! ¡Me hartaste!.¿Quién te creés que sos?.¡Andate!.

Se fue con su bolso lleno de regalos que le hicimos en casa. Una radio, una afeitadora, un porta retratos, una caja de herramientas nuevita.

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Perdoname Diosito.Espero que me hayas registrado a favor en el inventario. Al menos los años anteriores. Cuando tenía menos mañas, más energías y menos años.

Mañana viene Juancito. ¡A tomarse un ansiolítico!