Pasaron quince días ya desde que Marcelo volvió a su ciudad, a su hogar, a su trabajo a los brazos de....
A veces me pregunto si fue real el encuentro?
Pueden esas pocas horas marcarme en forma tal que llegué a pensar que nos pertenecemos?, si digo bien!!! porque el amor es pertenencia..
Se que lo amo. Me ama?
Se que lo extraño. Me extraña?

Me estoy volviendo loca...hablo sola, beso al espejo como queriendo atrapar su boca, duermo abrazada a la almohada reteniendo su perfume en mi cuerpo, le escribo cada noche deseándole dulces sueños y cada mañana le doy los buenos días con un tibio beso, lo llamo por teléfono tantas veces como puedo, para guardar el sonido de su voz en mi memoria.
No quiero acosarlo, no quiero perseguirlo, no quiero perderlo.....
Basta ya!!!! Que estás haciendo Maru!!! Dejate de tejer fantasías!!!!

Hoy me levanté con una sensación de vacío, dolor en el pecho angustia.
Diez de la mañana, atestados de trabajo en la oficina...siento una opresión en el pecho.

- Que te pasa Maru? - pregunta Gabo
- Nada...que se yo...un feo presentimiento, no me hagas caso - suena el teléfono atiende Naty
- Si aguarde un momento por favor, le comunico – tapando el auricular – Maru es para vos
- Quien es?
- No se... dijeron de la Clínica
- Que?....hola si?..
- Sra. Elvira Castro?, le hablo de la Clínica del Carmen
- Perdón no entiendo, si soy yo...que? de donde? ...
- Usted es la esposa del Sr. Marcelo Molinari?
- No...si....que pasa por favor?, que le pasó a Marcelo?
- Sufrió una descompensación, está fuera de peligro, le doy la dirección, pidió que le avisáramos.
- Si anoto, Naty por favor anotá ..., salgo para allá. Gracias.
- Que pasa, que te pasa Maru, sentáte estás blanca como un papel, te traigo un vaso de agua.
- No dejá, avisále a Antonio que me voy, Marcelo está internado
- Quien? tu amigo?, que pasó? donde?
- Si mi amigo, en la clínica del Carmen, la dirección que anotaste, no se que pasó, te llamo apenas me entere.
- Que pasa? – dijo Joaquín desde su escritorio
- Nada después Naty les cuenta, me voy, por favor que no sea nada si le pasa algo a Marce, me muero...
- No seas trágica mujer, andá tranquila, querés que te acompañe?
- No, estoy bien, beso hasta luego, llamo, chau.
- Cuidate Maru, saludos...

Baje las escaleras corriendo, llegué a la puerta y justo bajaba una mujer de un taxi, casi la empujé.
- Disculpe Sra., es de suma urgencia por favor chofer a la clínica del Carmen, Pueyrredón y...
- Si la conozco, pero que le pasa? que está muy nerviosa!, relájese es cerca , tomaremos por una calle que no haya tanto tráfico.
- Gracias, muchas gracias....- no podía articular palabra, el viaje duró una eternidad.
- Llegamos sra.
- Cuanto le debo?
- Son 8 pesos
- Sírvase – le dije sacando un billete de $ 10 – quédese con el vuelto, buenos días
- Gracias

Bajé del taxi y me dirigí a la mesa de entrada de la clínica
- Me podría informar en que habitación se encuentra el Sr. Marcelo Molinari?
- Está en terapia, piso 3º
- Que? – subí las escaleras corriendo. Los escalones de dos en dos, el corazón se escapaba de mi cuerpo, las lágrimas resbalaban por mi rostro – Dios mío que no sea nada...- repetía una y otra vez, llegué...

Transpiraba, un frío sudor surcaba mi cuerpo, me temblaban las piernas.
- El Sr. Marcelo Molinari?
- Es usted su esposa?
- Si soy su esposa, por favor donde está? como está?, que le pasó?
- Cálmese Sra., ya viene el doctor Carranza y le explica
- Dígame como está!!!! Quiero verlo!!!! – estaba desencajada, aparté a la enfermera, empujé la puerta
- Sra. no puede entrar...!!!!
- Quiero verlo y usted no va a ser la que lo impida...tengo que verlo!!!

De pronto se escucha una voz débil
- Maru, sos vos?, acá estoy mi amor – era Marcelo que me llamaba.
- Si acá estoy – lo ví estaba en la cama conectado a un montón de aparatos – hola, holitas... co tas?- le besé la mejilla, le tomé las manos, acaricié su cabeza – que pasho? Mirá que sos mimosho... – le hablaba a media lengua (sabía que lo divertía)
- Viniste....sabía que ibas a venir...

Aparece el doctor acompañado de la enfermera.
- Que hace acá sra.?
- Como que hago?, estoy al lado de mi esposo, esperando que me den explicaciones de que le pasó!!! – mi voz sonaba enérgica (a mi de ahí no me sacaban)
- Pero no es horario de visita el sr.....
- El Sr. está en el cielo y yo me quedo al lado de mi marido.
- Está bien - dijo el médico casi con resignación – por lo visto usted está decidida a quedarse, además su esposo no hacía más que pedir por usted...
- Gracias doctor veo que lo entendió, ahora por favor me explica que pasó?
- Tuvo un principio de infarto, no es grave...no llegó a causar lesiones graves, pero tiene un par de días de internación, hasta completar los estudios, por la tarde lo pasamos a sala intermedia.
- Disculpe mi comportamiento, pero somos muy unidos...
- Lo noté, usted es Maru? es así?
- Si soy Maru doctor, soy Maru – dije esbozando una sonrisa y mirando a Marce, que acotó
- Es como le dije doc?, terca como una mula, hermosamente pegajosa.
- Si sr. pero creo que se quedó corto hay una partecita que omitió, “tiene un carácter” que mete miedo – dijo el doctor mientras se alejaba sonriendo – hasta luego.
- Hasta luego doc – saludamos casi a coro
- Mirá lo que tengo que hacer para que estés a mi lado Maruquita...
- Por poco me internan a mí, que te pasó?, no le avisate a Andrea, estás mas loco que una cabra, bue yo también que te sigo la mentira... si se entera tu mujer, otra que el cuore...nos caga a tiros.... (Barreda versión femenina), jajajajjajajajajajaj
- Jajajajajaj, tenés razón pero me ashuté, y quería verte a vos, que curás todos mis males...nu te nojes...
- Ahora hacete el bb, te voy a reventar...nu te nojes... te voy a dar...carajo...- nos reíamos, señal que estaba mejor – bueno pero hay que avisarle a Andre, te parece?
- Más tarde por favor ahora quiero estar así tomados de la mano, si?
- Bueno, está bien, trata de descansar.
- Si ahora si

Cerró los ojos, la respiración serena, los colores habían vuelto a su cara, estaba sonriendo, se lo notaba relajado feliz. Nos quedamos así, yo sentadita al borde de la cama sosteniendo sus manos entre las mías, velando su sueño.
Abran pasado unos cuarenta y cinco minutos, entra el médico
- Perdón...está dormido?
- Si doctor como un bebé
- Me acompaña por favor, tiene que firmar unos papeles – solté sus manos con sumo cuidado y seguí al doctor.
- Creo que hay algo que usted debería saber doctor – estaba muy nerviosa pero le tenía que decir quien era yo – no soy la esposa de Marcelo...
- Como?, usted no es Elvira Castro? “Maru”, querrá decir que no están casados?
- Si, no...soy Maru, no estamos casados, no soy su pareja, somos amigos, él está casado con Andrea Laborde.
- Me perdí, disculpe...su amigo?, que clase de amigos?
- Muy amigos doctor, no piense en otra cosa más que una amistad entrañable, se que es difícil de comprender, pero somos más que hermanos, por eso mentimos, pero Marcelo tiene su mujer, ahora la voy a llamar por teléfono.
- Está bien, no más preguntas, pero si no es su esposa no puede permanecer a su lado.
- Lo sé doctor y por le pido un favor, haga una excepción no me aparte de su lado...
- No debería, pero creo entender la situación....yo no se nada ok.
- Ok. doc y gracias muchas gracias.

Saqué el Celular y llamé a Andrea
- Hola Andrea, habla Maru
- Hola como estás?, Marcelo está trabajando...llamalo al celu
- No quería hablar con Marce, más bien quería decirte algo de él, Andrea escuchame
- Te fue con el cuentito...de que le pedí el divorcio, ya te fue a contar tu amiguito...
- No, no se trata de eso.
- Entonces?, ya estoy harta de él, de vos, no tengo nada que hablar con vos...
- Marcelo está internado!!!, perdoná que sea así de brusca pero tenés que venir.
- Que...donde, que le pasó?
- Está fuera de peligro, quedáte tranquila, veníte a la clínica del Carmen, y conversamos.
- Salgo para allá.

Colgué con Andrea y llamé a Marcelo
- Holitas mi amor como estás?
- Hola mi vida, que sorpresa!!!
- Amor cuidate por favor – estaba nerviosa...
- Que te pasa Maru?, estás llorando?...amor contestáme
- No es nada, Cupido tuvo un principio de infarto, está fuera de peligro, pero pensé en vos, perdonáme pero quería escucharte.
- Amor, tengo el cuore fuerte como un roble, quedáte tranquila.
- Sipi...pero cuidate, besos te amo.
- Te amo, besos a montones.

Ahora... a esperar que llegue Andrea y aclarar todo este embrollo. Por mi parte ya entendí que pasó con Marce . Entre a la habitación en puntillas para no despertarlo y con esa voz dulce que tiene me dice
- Donde te metiste brujilda?
- Salí a llamar a Andrea...
- Ufa, no podías esperar?, no quiero verla!!!
- Algo me adelantó, Marce tranqui por favor...
- Te dijo lo del divorcio? – su voz sonaba angustiada, sus ojos llenos de lágrimas contenidas – no va más, creo que tiene otro tipo, y boludo de mí que pensé....- le tapé la boca con mi mano
- No digas más nada...entiendo, y no te adelantes a los acontecimientos, además si te ponés mal llamo al doc para que te duerma...- me besaba la mano y me hacía cosquillas – jajajaja, basta....loco mío, decí que estás conectado a todos esos chirimbolos y estamos en un lugar donde el silencio es “salud”, ya vas a salir y te voy a dar tu merecido....
- No podés adelantarme algo?
- Basta de joda....- le dí un beso en la mejilla y me senté a su lado
- Contame algo, o cantame bajito al oído, me gusta esa vocesita chillona que tenés...
- Ayudáme así bajito como cuando nos quedábamos de trasnoche después del teatro te acordás, que bien la pasábamos con Ernesto, Susana, León... No se porque pero por un momento sentí que retrocedíamos el tiempo, hasta me parece que el loco está tocando su viola y aquel olor del bodegón al que solíamos ir, mezcla de vino...madera...glicinas...te acordás de la glorieta en primavera...

El tiempo pasa
nos vamos poniendo viejos
el amor no lo reflejo
como ayer
en cada conversación
cada verso, cada abrazo
se esconde siempre un pedazo de razón....

Elvira Castro