Camino al alba, en lento desespero,
asomado al balcón de la esperanza,
bajo tinieblas, por precipicios quebraderos,
espero impaciente y lascivo, tu llegada.

Este grillo cantor de serenatas,
a la luz de la Luna, con melancolía,
y que adivina en el cielo, tus ojos de gata,
que me dicen que pronto serás mía.

Para saciarme en tus manantiales,
de tu feminidad deseoso,
lamo en deseos otoñales,
sobre ti cabalgo, cual corcel brioso.

Te tomo toda, te tomo.
Dentro de ti, en tu angostura,
profundidad del alma, dónde te gozo,
inicio a diario, mi aventura.

Eres mía, me perteneces,
entregándote a mí, sin reparo;
y ante todas las mujeres, amante mía,
yo , simplemente … declaro:

Vivo en prosa,
muero en verso,
del tacto de tu rosa,
yo soy converso.

Camino al alba,
en lento desespero.
Bajo tinieblas,
yo te anhelo.