Ahora,
Ahora yaces conmigo y a mi lado,
Desnuda, extenuada,
Plácida duermes, plácida.
Ya todo es paz, ya todo es silencio,
Nada queda del sudor embriagador,
Del calor de nuestros cuerpos,
De tus tibias manos dibujando por mi espalda,
De mis labios besando tu piel de caramelo,
De tu boca loca, suave, armoniosa… generosa.
Ahora,
Ahora te observo desde la alfombra,
Arrodillado, rendido,
Sincronizo mi respiración a la tuya,
Para recomenzar a ser Uno.
Desbocado, impúdico, temerario,
El deseo embiste,
Reactiva circuitos en mi cerebro amodorrado,
Te veo entre vapores verdes y amarillos,
Y sonrío y suspiro.
En un susurro grito tu nombre.
Me levanto,
¡¡ Lo siento !!
Imperioso es, posarme ahora, sobre tu cuerpo...
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