Las palabras del poeta
repiten su ausencia
como ladridos de un perro moribundo,
son ecos de un antaño,
de un oscuro mar
llamado a ser antesala de sabios,
de miserables sentimientos
que sienten que no siento
cuando la hora de la muerte,
de la ausencia de la vida,
se escapa entre sus dedos.
Texto agregado el 24-08-2006, y leído por 161
visitantes. (3 votos)
Lectores Opinan
06-09-2006
esos dos versos, con los que abres este poema, son hermosisimos... se cuelgan en mi y no se desprenden... 5* aruald
01-09-2006
Que sienten que no siento... Buf! precioso. Un placer leerte. chincheta
30-08-2006
porque no escribo yo asi? porque cada linea tuya es tan... perfecta? te odio. no sabes como te voy a echar de menos cada tic tac arikelilla
27-08-2006
El poeta... "aulló notas malvenidas,
las sombras arrebatadas
para el sueño de los justos" y "Morir todavía y no
después buscando sin remedio" ya sabes... "No se puede aplazar
la hora señalada" Tu poema me recordó su canción. >>>---Macarena--->>> Halcon_Rojo
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