Carta de Drupi Torres al fino Tato Rivera

Te saluda Drupi Torres, muy querido y fino Tato.
Saludarte yo quería desde hace ya mucho rato,
Pero órdenes urgentes que requieren de mi acato
Me mantienen ocupado, cuando no me ocupa un gato.

Me contaron que te ofende un perrito mentecato,
Y que cada vez que sales, él te ladra: "¡Garabato!";
Que te gruñe, que te asusta, que te reta al pugilato,
Que es muy feo, colimocho, que del diablo es fiel retrato.

La noticia me enfurece, me alborota. ¡Yo lo mato!
No te angustien las molestias, no te angustie el rudo trato;
Como defensor de primos tengo yo el generalato:
Si lo veo por mi cuadra, ahí mismo lo desbarato.

Un consejo quiero darte, mejor que el bicarbonato:
Deja tanta pataleta que pareces un locato.
Dice mal de un perro fino ir por ahí oliendo a flato,
Y dejando que el pulguero le levante sindicato.

Si un bañito en el semestre para ti es lo más sensato,
Con bañarte los domingos, dejarás de ser mulato;
Pero di no a los perfumes, se resentiría tu olfato.
(Que el olor que tu despides, es de chivo y de nitrato.)

En cuestión de garrapatas, mi consejo aquí es mandato:
Ni en la oreja ni en el rabo, garrapata o garrapato.
Cuídate esa piel, Tatico, que la sarna no es boato;
Y en el parque, no en las camas, evacua con recato.

Modifica tus maneras, que pareces un pacato,
Un pacato remachucho más mugroso que un jabato.
Déjate de lloriqueos, el coraje mantén lato;
Que te admiren la perritas y que digan: "¡Ahí va Tato!";.

Si te llevan a la finca no te juntes con el pato;
Si su fiebre se te pega, que te curen con fosfato.
No te atranques de basura, si te cae mal el mecato.
(Pues me cuentan que te vieron atorado de un zapato.)

Si tu amita es resabiada, y es de gasto michicato,
Nunca, nunca la critiques, más vale aquí ser cegato.
Cuida bien la casa tuya, no te escondas timorato,
Que algo bueno ha de tener, hasta el amo chichipato.

Ya te dejo pues, entonces, recordado primo Tato.
Recibime esta bandita; se tejió para tu ornato.
Y sin más por el momento, se despide: Drupi el ñato.
P. D. Y mejor no te visito, no va y seas mi vocatto.