Vuelvo a ser quien fuera en otras edades: un hombre consciente sin debilidades. Triunfa el pensamiento, vuelve la conciencia, y en la existencia muere el pensamiento. No más ilusiones, ya la voluntad altiva y audaz, arredra emociones. Vuelvo a ser quien fuera domino el sentir y en este vivir mueren las quimeras. No más amoríos ni superfluidades, no más desvaríos ni más vanidades. Triunfa mi ideal, el arte es mi mundo soy un errabundo que no puede amar.
Texto agregado el 22-08-2006, y leído por 91 visitantes. (1 voto)