A veces soy un profano proxeneta,
un libertino y vil anacoreta,
un felino sensual que busca el vicio,
y se pierde entre sutiles maleficios.
Soy un ser sentivo y lujurioso,
amante del amor, el sexo y el reposo,
de piernas que se cruzan en la cama,
de gritos que se ahogan en la almohada.
Un amante pérfido, intensionado,
capaz de bucear por todos lados,
buscando en las pieles las pasiones,
buscando en tus jugos, en tu olores.
Amante de oralidades fatuas y fruitivas,
de lengua y humedades fugitivas,
de dedos y yemas, llamas vivas,
que se quedan en tu alma y en tu vida.
Me gusta penetrar tus sensaciones,
hacerte sentir el balanceo,
en lo más profundo del deseo,
regarte de simiente en brutal acometida,
para que intensa sea la partida,
cuando te elevas por encima de la vida,
y gritas, gimes , gozas, tiemblas , lloras,
me dices que me amas y me imploras,
que siga penetrando en tus sentidos,
como un duende vil y libertino,
que te succione los hombros cual vampiro,
que sea tu hombre, tu bestia y tu felino |