La noche me encontró obnuvilado y un tanto pacifico. El sueño me habia despertado de un sobresalto, mostrandome una habitación oscura, y sumida en las tinieblas de lo onirico.
Cegado de tantos deseos en un solo sueño, desperté sin saber incluso en donde me encontraba; y aunque todo fue repentino y doloroso, hubiese preferido seguir en mi inconsciencia, al menos unos segundos.
Con incontenibles ganas de gritar, por haber vuelto al "mundo real", comenzé a desatar las redes del sueño e intentar deshilachar cada una de sus tramas y dramas.

Inmerso en un mundo donde el individualismo es la utopìa de los tiranos; donde la caridad y el altruismo han pisoteado ya al egoismo y al "bienestar material" hace muchos años; donde las fronteras solo perduran por una cuetion estetica, y no para dividir a los paises; y la permanencia de las banderas, solo para hacer historia, y recordar que en algun momento preterito un trozo de tela identificaba a las sociedades (esas que ahora son una sola, y en unida harmonia conviven), que menospreciaba, y destruia y masacraba pueblos enteros e inocentes por otro trozo de tela, por otro tramo de tierra, donde los que quedaban "vivos", desterrados de su dignidad, heridos por haber perdido a todos sus seres queridos, y preferir estar muertos para seguir junto a ellos; asesinados a quemarropa de por vida; perteneciendo, como esclavos o presos, a los invasores que han venido a prometer trabajo, bienestar social, materialismo, paz. Una paz cuyo metodo y fundamento surge de la violencia, el exterminio; el poderio y control de empresas que pertenecen a paises imperialistas, basadas en leyes propias que poco tienen que envidiarles a las de los paises de las cuales surgen; explotación, maltrato, denigramiento de las masas indefensas (las "minorias"), porque "...no tienen nada que perder; al menos que sirvan para algo..."; donde las principales empresas y paises que defienden y hacen campañas por el medio ambiente, son las que mas armas utilizan para destruirlo; y los paises explotados, los de los que no tienen nada que perder, son los mas afectados; deformados por desechos quimicos, maniatados por enfermedades cronicas; y "sin futuro" por que no encajan en la globalizacion y las ideas expansionistas que estos paises tienen para sus tierras.
Trozos de telas para hacer historia, para recordar que en un lejano pasado la colonización había "descubierto" una tierra que ya existía, ya estaba allí, y que ya tenía sus propios habitantes. Basados en ideas sin fundamento teórico ni practico, era hora de "civiliizar" a esa gente; y qué digo gente, "salvajes", "barbaros" sin cultura, con religiones paganas y heregeticas que calumniaban la eterna esencia de Dios; un Dios que bien ahora podría ser el mismo para todas las religiones porque ya poco le importa, pero que en aquel momento estaba de la mano del la "limpieza", la aculturación, la obligada enseñanza de "una vida en verdadera sociedad", el exterminio de sus lenguas y creencias para convertirlos en seres humanos, y dejar de ser el antepasado del hombre en el presente. Y poco importa si cambiaron oro por "baratijas", si desidieron tambien ocupar junto con sus habitantes esa extensa tierra plagada de recursos naturales; lo que si importaba era quitarlos de su camino, pero no a modo de exterminio, no; la idea era mas "racional", utilizarlos y explotarlos para el beneficio propio, en nombre de la corona y de un monarca elegido por Dios... el mismisimo Dios. Durante siglos la exclavitud, el abuso y maltrato de seres humanos (de manera fisica y psicologica; cultural y social) fue el mercado mas imponente y poderoso; personas usadas como mercancias, como objetos de trabajo sin identidad personal. Y llegó el momento en que los aborigenes (o "indios" como un ignorante llamó al creer que se encontraba en India) comenzaron a quejarse, escaparse (o al menos intentarlo) y empezó el cruel exterminio, la matanza a diestra y siniestra; el genocidio (o etnocidio, como los intelectuales prefieren llamarlo; como si en la clasificacion de un asesinato en masa existiera la diferencia conceptual). Y, a su vez (causa y efecto), llego el momento en que los esclavos, los que por determinacion biologica "nacieron para los labores brutales y manuales" escaceban. Fue allí donde el continente africano cedió, participó, sin permiso ni previo aviso, a la "recarga" de esclavos. Seres tratados como "retrasados en la evolución", comparados con niños por su inteligencia, con animales por su brutalidad fisica, y como maquinaria de trabajo por que asi lo aseguraba la tan famosa teoría de la evolución de las especies, y la supervivencia del mas apto convirtió a los invadidos y deterrados en la nueva raza de esclavitud, y en el nuevo chivo emisario.
Millones de africanos eran desterrados y llevados a "La America", con la excusa de que eran asesinos encarcelados, ladrones, llevados en barcos cargueros en inhumanas condiciones, donde solo la mitad llegaban vivos, y la mitad de éstos morían en tierra por la mala alimentacion, y enfermedades surgidas por esto mismo. Cuerpos y mas cuerpos arrojados a las profundidades del oceano, y no solo cuerpos, sino también la última generación de muchas familias, algun padre y marido, algunos hijos y nietos de quienes habian muerto dias antes en el mismo barco, el mismo destino; otra excusa era que simplemente gente de familia cedía por propia convicción para las labores; y de esa manera se justificaban y se quitaban las culpas de cometer una de las barbaries mas espeluznantes que han existido en la historia de la humanidad.
Y en el sueño, en un pasado no muy lejano, pasaba algo parecido. No esclavitud, por que ahora existen los derechos humanos, pero si la violacion de éstos. Derechos ignorados por acciones completamente contradictorias a sus leyes; no existe la esclavitud, pero si las interminables jornadas de trabajo, acompañadas de bajisimos, diminutos salarios. De la mano del maltrato, el hambre, la explotacion de niños, desnutridos y enfermos, las empresas se agrandan y se expanden cada dia mas sin importar los fenomenos que esto traiga, ni los terribles efectos que su expansión cree. Siempre y cuando unos pocos, sin importar cuántos, sigan consumiendo el consumismo social, el fin justificará los medios, y los medios serán dueños de los fines.
En este revelador sueño, sin viajar muy lejos en el tiempo, los paises "sub desarrollados" (llamados asi por su falta de capital, exceso de mano de obra barata, y por estar corridos y hasta expulsados a la fuerza del camino de la globalización) son los que pagan los platos rotos, sin que "los de arriba" se olviden de ninguno en la factura.
Continuando con la descripcion de mi sueño, en America Latina, incluso hasta principios del siglo XXI, donde el desarrollo social y economico ha llegado a sitios antes inimaginables, la matanza ideologica, racista, laboral, etnica, y por simple placer, continua haciendo subir las tasas estadisticas a cifras que de mirarlas provocan un terror incontenible. En tierras donde los golpes de estado, las dictaduras fomentadas y creadas por los paises (o el pais) mas desarrollados provocaron millones de muertes, asesinatos, torturas y encarcelamientos el pueblo no olvida, pero los asesinos si y continuan financiando matanzas y abusos a los que amenazan, tanto estructural como ideologicamente, su expansión y dominio del mundo, en epocas en las que todos y cada uno de sus habitantes saben que la superioridad no existe. Lo que si existe es la superioridad economica, y eso parece ser suficiente para mover las piezas como se les ocurra, siempre en miras al beneficio propio o de algun pais asociado.

El despertar de este sueño fue de manera pacífica y con una pequeña sonrisa en mis labios; por que todo esto era pasado, un tiempo pisado y superado (aunque no olvidado) por la convivencia, pero en el verdadero sentido del termino, en el "vivir con", no en el "sobrevivir en". Un sueño donde la tiranía, la impunidad, el racismo, los asesinatos dirigidos por paises eran castigados y no actos premiados. Un sueño donde la honestidad, el trabajo, la bondad, la verdad, el compañerismo y el altruismo, las diferencias de ideas y el respeto a las diferencias ideales, culturales y de color son premiados, y no castigados y metidos en un cajón para que nadie se entere de que realmente existen; donde las virtudes de los hombres van de la mano con sus defectos, y no donde estos últimos las pisotean, las patean y las dejan por años y años moribundas, creyendo éstas que podrían recuperarse, y en ese mismo momento, vuelven a molerlas a palos. Un sueño donde la gente trabaja para vivir, y no donde vive para trabajar; un lugar donde reine el "salvemonos entre todos" y no el "salvese quién pueda"; un lugar donde se vive por el simple hecho de vivir, y no el de vivir para tener o para ganar; un lugar donde el pueblo no se alimentará solo de promesas; donde todos harán lo que les parezca mas justo, y no lo que mas le conviene; un lugar donde seremos compatriotas, esperados y no desesperados; donde encontraremos a los perdidos, perdidos de tanto buscar; un lugar donde la muerte haya perdido ese poder mágico de sorprender a la gente, porque habremos vivido de manera tan feliz y saludable, que la estaremos esperando con respeto, y no la encontraremos en la primer esquina que giremos. Un lugar donde la gente de la calle no serán tratados como basura, por que no habrá gente de la calle; donde no habrá ricos, por que tampoco habrá pobres; donde los paises solo guardarán sus nombres por memoria, por que no habrá fronteras.
Quizas este sueño me mostró un mundo donde vale la pena vivir, donde uno vive feliz, tranquilo y no inmerso en la seguridad y en la desconfianza del otro; un mundo donde el projimo es un amigo, y no mi supuesto asesino. quizás por eso prefería quedarme, al menos unos segundos mas, soñando y siendo abrazado por él; pero fue simplemente un sueño.

Emanuel.