Sólo una vez he intentado traspasar el umbral que divide nuestro mundo material del supuesto espiritual, trate de varias formas, y no lo conseguí, finalmente me dormí, o eso pensé.
Sólo una vez intente separar la mente de mi restringido cuerpo, ¿lo conseguí?, no lo sé, pudo haber sido solo un sueño, sin embargo, cuando abrí los ojos me encontré en otra parte, mas no era como me lo había imaginado, pensé que encontraría un mundo cubierto de nubes, con una gran puerta dorada y un hombre esperando, pero no, esa idea solo podría ser de un infante, también imagine otro mundo como el nuestro, con la diferencia de que todos eran felices, y todos realizaban lo que mas les gustaba, sin embargo eso no sucedió, igualmente pensé en un paraíso terrenal, en un jardín del edén, todo cubierto por un verde pasto, árboles por doquier, aguas y cielo limpios y transparentes, pero no, lo que vi fue otra cosa.
Era un lugar extraño, muy diferente a todos aquellos que podía imaginarme, estaba solo, oscuro, no había norte ni sur, tampoco paredes o un suelo que dijeran donde es arriba y donde es abajo, sin embargo, estaba parado sobre algo sólido pero a la vez transparente, pero eso no lo puedo afirmar debido a la oscuridad. Pensé que solo había conseguido proyectar mi mente cruzando la atmósfera terrestre, y que me encontraba en el vacío espacio exterior. Estos pensamientos se borraron al momento de presenciar una sombra dirigiéndose hacia mí, era veloz, ligera y posiblemente traslucida, no la podía ver, pero si podía sentir su presencia, era dominante, irradiaba sabiduría, tranquilidad, confianza y otras cosas que no podría describir.
Mis oídos no lograban escuchar nada, pero extrañamente mi mente percibía una voz, a pesar de que no decía nada comprendí que me preguntaba mi nombre, yo sin decir una sola palabra le respondí, me hizo varias preguntas sobre mi vida, hasta que yo pregunte que quien era él, logré comprender que no tenia nombre o al menos no uno que yo pudiera entender, después de un cierto tiempo concluí que él era el dueño, señor y creador de todo lo que veía y de lo que no.
Me comento que estaba ansioso y orgulloso de que yo lo hubiera visitado, eso me extraño mucho, porque pensaba que todo aquel que moría se dirigía a ese lugar, entonces me dijo algo que cambiaría la forma en que por mucho tiempo había percibido la vida.
Entendí que era mentira que el ser humano al morir pasaba a otro mundo, pero que no era imposible, me dijo que solo aquellos que lograran descubrir los verdaderos secretos ocultos del universo tendrían la capacidad y el derecho de preservar su existencia y coexistir en ambos mundos si así lo deseaban.
¿Era acaso que yo había podido descubrir dichos secretos?¿Y era por eso que me encontraba en ese lugar?, no, me respondió, dijo que yo solo había encontrado una especie de atajo, y que muy rara vez él permitía el acceso de esa forma, pero había pasado mucho tiempo desde que el ultimo hombre lo hubiera visitado.
¿Y esos hombres donde están?. Se han ido, me dijo, se han aburrido y coexisten en otro mundo mucho mas imperfecto que el tuyo.
Jamás me comento su origen, pero si que él había creado a nuestro universo, no como lo dice la Biblia, mas bien creando las leyes para que por sí mismo se creara, él era el dios creador, pero no el dios noble y bondadoso que nos hacen creer las religiones, él había formado al hombre como mera diversión, como simple entretenimiento, en un principio influía en la vida de este, pero termino por aburrirse, así que decidió dejar que tomaran sus propias decisiones, pero a la vez les otorgo el camino para poder llegar a él, lastima que la mayoría malinterpretara el camino, y que solo lo utilizaran para aprovecharse de aquellos que verdaderamente querían seguirlo, hubo y todavía existen farsantes que dicen que lo que ellos piensan es el verdadero camino, y por desgracia las personas se lo creen.
Y que hay de las alabanzas y devoción hacia ti?, le pregunte, y el me contesto que la devoción es solo una debilidad que depende de la edad y la salud, que los hombres se vuelven débiles en cuanto sienten que van envejeciendo y por lo tanto sienten la necesidad de buscar a alguien que los proteja y que les asegure la existencia después de la muerte
Él en ningún momento implanto leyes de conducta a seguir, que cada persona tiene sus deseos y sus leyes y solo deberían regirse por estas, cada quien tiene derecho a seguir sus impulsos.,
Sin embargo, si todos siguieran sus impulsos, el mundo sería un caos y que todos querrían aprovecharse de todos, le dije. Los impulsos del hombre solo sirven para satisfacer los deseos individuales, sin importar el daño ocasionado a los demás; eso me pareció algo egoísta, pero me dijo que esas eran sus únicas leyes, las leyes de la naturaleza, y que los instintos del hombre no son tan malvados como parece, se vuelven egoístas por la influencia de otros hombres, es cierto que no falta alguien que quiera aprovecharse de estos instintos y tratar de doblegar a los demás, sin embargo aquellos que fueran doblegados sería porque así lo desean, y es porque sienten la necesidad de servir a alguien o porque son muy débiles para poder ver sus verdaderos deseos, y si en verdad desearían ser libres, se rebelarían y lucharían por conseguirlo. ¿Y que hay de aquellos que lo desean pero que no tienen la capacidad para luchar?. Y me dijo que todos tienen la capacidad y habilidad para realizarlo si es en verdad que lo desean, “y recuerda que nunca se te concede un deseo sin concederte también la facultad de convertirlo en realidad, sin embargo es posible que te cueste trabajo”.
“El mundo es tu cuaderno de ejercicios en cuyas paginas realizas tus sumas. No es la realidad, aunque puedes expresar la realidad en él si lo deseas. También eres libre de escribir tonterías o embustes, o incluso de arrancar las páginas.”
Lo ultimo que recuerdo, fue que me dio una pequeña ayuda según él, para que pudiera volver a visitarlo, diciendo:

“¿Cómo podrías desplazar la ilusión de un sentido limitado de identidad de un continuo espacio-tiempo, a través de la ilusión de restricción material?”