Después de un largo tiempo sin encuentro con las letras,
Vuelvo a sentarme con esperanzas de atraer a mi mente palabras que no desafinen.
quizá haya recuperado la voz,
Y pueda sin dificultad volver a encontrarlas.
Pero aveces hay que esperar a que vengan sin mi llamado;
Es que tienen que encontrar a la inspiración, a la imaginación,
a las ganas o a algún factor que este en la misma escala
para por lo menos llegar a armar un solo compás.
Cuantos más de ellos haya,
más cerca voy a estar de lo que quiero llegar,
si solo tengo las palabras,
no podría ilustrar esta idea con tal calidad de sonido
Aveces siento a las palabras rondar en mi cabeza con tal disonancia por encontrar algún contexto
para colocarse
que prefiero poner mi mente en blanco.
pero aveces algún factor,
(sobre todo la inspiración) parece un silencio de redonda por todo lo que demora,
quizá su órbita la recorré a menos velocidad que la duración de el recorrido de las palabras en
mi kabeza
pero en si, estos recorridos cambian,
y es por eso que surgen distintas cosas,
entonces los rencuentros entre las palabras y sus contextos suelen ser irregulares,
además de que es dificíl que puedan encontrarse todos juntos, es por eso también que pocas veces
existe el conformismo total.