La pasión y el deseo son dos hermanos que me acompañan en mis noches solitarias. Deseo estremece mi cuerpo y Pasión enloquece mi mente, no hay manera de sacarlos de mi existencia.
Vinieron a mi cuando las corrientes rojas de la plenitud se estrellaron contra mi vientre y ahora me han convertido en su esclava, su discípula y protegida.
No tiene caso que intente huir, ellos dos siempre me encontraran, maldecirlos no puedo, porque si lo intento los venero.
Me he convertido en una bestia salvaje, con los cabellos de fuego, los ojos de pasión y la piel de deseo.

Pasión y deseo dominan mi mente,
Pasión y deseo destruyen mi moral,
Pasión y deseo devoran mi pureza,
Pasión y deseo arrasan con mi razón.

¡Vuélvanme loca, vuélvanme loca!

¡Enfermen todos mis sentidos! ¡Sáquenme de la realidad! ¡Quiero que me pierdan en sus brazos! ¡Hinchen mis labios con sus roces de demencia y ahóguenme en las profundidades de las perversiones!
Ahora estoy en el bosque de los pecados y de la noche perpetua, vagando en el delirio de mis sentidos y fantasías. Nadie me ha cazado, soy totalmente inalcanzable, yo cojo a mi presa y me deleito con su sangre.
Bailo alrededor de las llamas bañadas con el sudor de mi cuerpo, mientras destruyo el rastro del velo blanco de la niñez.
Mis sentidos agudizados por la pubertad me alertan de todo, el olor de un hombre ha llegado hasta mí. Un cazador, mi presa anhelada, retira todos los obstáculos con su imponente escopeta, parece estar muy orgulloso de ella, moja sus labios y la besa.
Un dulce varón se acerca ¡Que valiente! Sus ojos son amenazantes, pero no tanto como los míos, su olor a carne despierte el apetito de deseo y sus pensamientos hacen lo mismo con la lujuria de pasión.
Mi bestialidad sexual es más poderosa que sus escopetas, corro para adentrarme a las profundidades de mis dominios mientras él me persigue, ha caído en mi trampa, cree que huyo, pero es él quien se ha sentenciado y a apostado por el éxtasis de su derrota.
Bienvenido Cazador, mi profundidad no se compara con la del bosque, es mas húmeda y estrecha ¿Acaso no puedes escuchar como ella llama a tu escopeta? baja tu arma de metal, no te servirá de nada, la carne es lo único que te puede defender, no hay escape de mi aliento y tampoco de mis piernas.
Mis garras arrancaron la ropa de tu cuerpo, te tengo completamente desnudo cazador, una de tus armas esta en el suelo y la otra no quiere amenazarme, trata de resistirse. No tienes ninguna defensa, eres mío completamente, te recuesto en el suelo y me coloco sobre ti, mis labios devoran los tuyos y mi olor te esta enloqueciendo. El calor en su cabeza no te permite planear tu escape, tu arma ya se encuentra en mis profundidades, estas dentro de mí, pero soy yo la que te poseo y entro dentro de tu boca.
El latir de tu corazón, tu respiración y tus caderas, todo te delata, ya eres mi victima. Funde todo tu ser conmigo, quiero devorarte, matarte y revivirte, drenare todo de ti.
¡Vamos! ¡No desfallezcas! ¡Continúa respirando! ¡Bebe de mis pechos la leche que necesitas para continuar con este acto carnal! ¡Lleguemos al clímax de nuestra cacería! Me tragare tu lengua y tu saliva.

Pasión y deseo corrompen la Masculinidad,
Pasión y deseo humillan al Hombre.
Pasión y deseo violan al macho.
Pasión y deseo penetran al varón.