En el mismo banco
tu
y
yo
con el corazón más cerca que nunca
y los
cuerpos
alejados
nos
mirábamos.
Te vomité mis miedos
Me confesaron tus ojos
tus realidades v/s sueños.
El suspiro de la despedida
se ahoga en un beso tímido
Como si nunca me hubieras besado...
El aliento vaporoso
El frío que cala y congela
las lágrimas.
Y hablamos
de todo
de nada
como si no fuéramos a separarnos.
Y ambos escondimos
las palabras de adiós,
nos limitamos a esas pausas de silencio
que te dicen todo...
Evitamos tocarnos...
Tu no me dices
que me necesitas
Y yo no te digo
que Te Amo.
Y dejamos el banco congelado
estampado el recuerdo
de una despedida sin adiós
Y caminamos
transparentes
por la húmeda noche
silenciosos...
Un beso
nos damos
-Te quiero-
-Yo también-
Y te vas.
Texto agregado el 06-08-2006, y leído por 237
visitantes. (7 votos)
Lectores Opinan
24-09-2006
Cada uno, buscando sin buscar, caminando por su propio camino y sólo se encuentran para decirse algo...y lágrimas entremezcladas con la sosobra de un momento.
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Triste y a la vez enigmático sentir.
Elfo_D
13-09-2006
Efímero. Así es. Me recordó el poema de Yeats, aquel. Saludos!!! clown_is_alive
07-09-2006
oh!!! me encantó... las historias son las mismas con diferentes personajes... después del adiós te quedas pensando que tal vez mañana tendrás el valor. Un abrazo y gracias por la emoción. jackievidela
16-08-2006
..que triste..pero no hay adios cuando aun se ama.. Mildemonios
09-08-2006
El amor más puro que se esconde para no ser arruinado, y que se despide de adentro porq nunca habra un adios real. avy