1 ¡Yo no hablo solo, no lo hago!... ¡digan lo que digan, es mentira!
2 ¿No lo haces?
1 No, no lo hago.
2 ¿Seguro?
1 ¡Sí, seguro!
2 No te creo.
1 No quiero pelear contigo.
2 No lo hagas.
1 ¡Ándate! Estoy reflexionando ¿No puedo estar nunca solo?
2 No quiero.
1 ¿Puedes volver más rato? Ahora necesito pensar.
2 ¿Y qué si no?
1 Si no te vas, te pego.
2 Atrévete.
3 ¡Ya están peleando ¿Qué les pasa ahora?
2 Pasa que éste es un tontito…
1 ¡Ándate, si no quieres que…!
3 ¡Cállense los dos!
1 Quiero estar solo, y él no hace más que molestar.
2 No dijiste que querías estar solo.
1 ¡Mentiroso! ¡Si ya te lo dije!
3 Como sea, sus gritos me tienen loco… tú, cálmate, y tú, déjalo tranquilo un rato, si quiere estar solo, respétalo.
2 Sí, como tú digas.
3 Ahora, no griten más, que me duele la cabeza y quiero dormir. Adiós.
1 Ahora que se fue, ándate tú también.
2 No quiero.
1 ¡Pero tú dijiste que…!
2 Digo muchas cosas.
1 ¡Ándate!
3 ¡Dije que se callen, el parcito!
2 Sí, pero él es quien grita (a 1, bajando la voz) Está bien, me iré, pero que te quede claro… no te desharás tan fácilmente de mi…
NOTA: Este personaje es inventado, como en el resto de mis soliloquios (las verdaderas peleas conmigo no las escribo). |