Auspiciante de un cuento de terror q nunca empezó. Traficante de nubes sin lluvia, Amiga de los duendes y repartidora de polvo de estrellas. Vende a los pobres escaleras a los sueños, y compra sus ilusiones tratando de ser mejor. Escucha las voces pero no acepta las críticas. No puede ordenar su cuarto y menos sus ideas, se pierde entre su ropa y mas a la hora de decidir un camino a seguir. Busca a la gente perdida y trae sus mensajes desde el cielo. Es un ángel, q le cortaron las alas. Parece llevar en ella una energía distinta a la de los demás la expresión en su rostro no permite mirarla a los ojos, no permite mirar el color d sus ojos, esa imagen se borra. De estatura media y poco feliz, estudia para ser actriz sin darse cuenta que ya lo es simplemente cuando se miente a si mismo. Escucha ese crash crash de las hojas secas en otoño, mira el cielo y habla sola. Lleva siempre con ella un gorro que la cubre del frío viento d invierno y la cubre también de los viejos recuerdos q no permite q le lleguen a sus oídos. Es del país de las pancartas donde el pánico de perder los sueños es cada vez más grande. Parece q un huracán de estructuras hundió para siempre el que dirán y alimento entonces sus estupido ego. Viajaba en el avión q se estrello en la isla del tiempo, allí es donde los anhelos son inútiles y los gritos se ahogan en la poco agua que le queda al mar cansado de recibir mensajes. Solo algunos salen de allí simplemente si miran a su alrededor y captan el tiempo q hay en el aire. Un laberinto de palabras, un leñador sin leña ni fogata, un mensaje sin lealtad, una narradora que cree todavía q puede crear un mundo para otros q como ella pertenecen al moviendo de los pobres corazones. Se manifiestan callados pero con letras. El movimientos de los pobres corazones no lleva carteles pero lleva masas de gente, no lleva gritos ni cantos, pero lleva libros y textos, no lleva disturbios lleva claridad, yo soy del moviendo por q mi corazon es uno de los pobres corazones...