Luchaste hasta tu final…
Luchaste hasta que “los buitres con garra de oro” te quitaron la vida y a mi…. Un padre
Luchaste para que yo y todos los niños viviéramos felices…
Luchaste para que nuestras vidas fueran dignas…
Luchaste por el amor de tu vida.

Cuando niña no entendí lo que era el MIR… mi madre trato de que lo entendiera… con ese tono tan característico… lo recuerdas.

Hoy que tengo la edad suficiente… lo he averiguado, muchas personas me hablan de ti… todos concuerdan en que eras feliz, ya que no bastaba con ser alegres, que luchabas y entendías todo tipo de proceso, ya que la fuerza natural se perfecciona con disciplina.
Me contaron como me recordabas o por lo menos como te emocionaba el saber que crecía bien, pero las distancias hacían que no supieras como realmente yo estaba…estábamos en distintos países, yo como asilada política y tú como el terco luchador que fuiste… llegó el día en el que supe que los diarios muchas veces mienten y sobre todo cuando son manipulados por la “soberanía del poder”.
Se dijo que habías puesto resistencia, que habías salido armado de la casa…pero fueron los agentes de la CNI los únicos armados, lo supe por que mamá era la mejor fotógrafa que podía existir y sabia como tomar y esconder su cámara, fueron los únicos documentos visuales que necesite ver para saber que no te opusiste y que fuiste fiel a tus principios y que ellos prepotentes te golpearon…llevándote lejos…lejos de aquí.
Fue ahí que mi madre cayó presa y yo… yo ya no tenia padres…solo a mi padre medico el que asumió cuidarme como a su propia hija… llegue a chile siendo muy niña… llegue a Villa Grimaldi tratando de entender lo que ningún niño quiere entender a esa edad …

“Bueno aquí estuvo tu papá sus últimos días… me decían.
Y que le hicieron!!?...
Lo torturaron”

Hoy entiendo que en esa villa tu sufriste por algo que estaba en tus principios y lo que a nadie se le debe negar… su opinión.

Hoy entiendo que ese día de verano tu no fuiste donde mi abuela… fuiste a luchar…a una lucha propia y ajena a la vez….

Hoy sé que me faltaste, padre…pero estoy orgullosa de que halla sido así… ya que no faltaste por que quisieras, faltaste para que yo no le faltara a mi madre y mi madre… no me faltara a mi.

Para el padre que conocí ya de grande y al que pretendo imitar por su fuerza y valor… y a los muchos padres, hijos y familiares de detenidos desaparecidos… de Chile y el mundo…