| ...a odiarte no me obligues.Lo nuestro ya es historia,
 _¿ de qué sirve ?-.
 Tan grande era el amor.!..(Hoy ya no sé)
 ...cuando nos cruzó la vida...
 Tenía todo el tiempo del deseo,
 la pasión silvestre,
 la piel joven,
 la luz en la mirada,...
 aquella sensación de creerme impasible,
 perpetua, poderosa...
 Y ahora,
 después de tantos años,
 ¿ Qué importan tus _Debía..._,
 _me arrepiento_,
 tus _Tendría que haber..._,
 _te lloro todavía..._?;
 ¡ Qué me importa !
 Porque hoy estamos solos;
 vos allá, infinitamente lejos...
 (Me sonrío recordando
 cuando medía las distancias
 por las horas de vuelo ).
 Era todo tan dócil...
 
 No me obligues a odiarte;
 no escarbes los desechos
 de dos amantes locos.
 No profanes los huesos
 ni gusanos,
 ni fotos guardadas
 ni fetos abortados.
 No me incites a revivir el duelo.
 
 Hoy llevo puesto otro vestido,
 de esos que no ciñen,
 un poco mas oscuro,
 mas discreto...
 que desencanta un poco si me miro al espejo.
 Arrastro arrugas nuevas,
 -de esas que no se planchan-
 y esa grieta
 que carga el corazón;
 (no mienten los poetas).
 
 Fuiste...
 cobarde, débil, indeciso...,
 pero fuiste.
 No lamentes ahora
 tus opciones erradas;
 no busques, no provoques...
 Fuiste...
 Y aunque sigamos siendo,
 hoy no sos nada.-
 
 
 |