Las nubes pasaban lentamente y parecían en momentos detenerse en ese cielo azul de una hermosa tarde de domingo.
Zam levanto la vista y dejo que se perdiera en ese espectáculo que era ver el Popocatepetl y la hermosa mujer dormida, que por siglos han sido los guardianes del valle.
Una voz lo sobresalto.
Era Lobo quien sonriente y no sin cierta ironía le comentó:
--Muchachito no me digas que estas romántico
Zam contestó, más molestó que sorprendido.
Tú no tienes respetó por nada ni nadie.
--Mira niño vengo de buen humor, acabo de tomar una pepsi bien fría, tengo cigarros, acabo de recoger la ultima revista de Eros y es domingo, ¿puedo pedir algo mas a la vida?
Zam prefirió ignorar a lobo, pues a veces pese a su edad, la simpleza de lobo lo desesperaba.
--¿Y tú que haces? Insistió lobo.
Leí un texto que nos dedicaron y estoy muy preocupado
--No me espantes contestó un lobo preocupado mientras volteaba hacia todos lados, no me digas que ya hay alguna orden de aprensión en nuestra contra.
No que yo sepa, ¿pero por qué tienes miedo lobo?
--Bueno por nada, no me preocupa nada, claro quitando el pequeño problema que desperté a la esposa del alcalde, que me encontré de casualidad a la novia del campeón de box de la ciudad y la caída de los valores bursátiles del teleférico de los volcanes.
Oye lobo, pero eso es absurdo, que tiene de malo que despertaras a la esposa del Alcalde.
--Pues es que la desperté con el codo.
¡Dios! Eso es grave, pero a la novia del boxeador, no entiendo en que te afecta haberla encontrado.
--Tal vez por el lugar, respondió lobo, me la encontré en un motel.
Caray espero que no se entere el boxeador, con lo violento que es, comentó Zam ¿y quien la citaría en un motel?
--Yo; contestó lobo.
En verdad que estas en problemas, pero oye no entiendo lo de la caída de los valores del teleférico, si los volcanes no tienen teleférico.
--Pues por eso, a los tipos que se los vendí, ya “cayeron” en cuenta que todavía no existe.
Pero eso es fraude, comentó molesto Zam.
--Claro dijo lobo, eso le dije, si ellos ya los habían comprado, no se vale que quieran que les regrese su dinero, no tienen seriedad.
Pero el teleférico es un proyecto todavía.
--Más a mi favor, argumento lobo, los valores bursátiles eran a futuro.
No tienes perdón, dijo resignadamente Zam.
--Pero bueno como te dije eso son cosas leves, entonces cual es tu problema.
Este texto que nos dedican, no sé como responder y Humberto esta igual o más preocupado, decía esto Zam, mientras le extendía a lobo una copia de un texto.
Lobo lo leyó, y la cara clásica de cinismo se transformo en un gesto de preocupación y también de satisfacción.
--Es hermoso, muy hermoso, aún que lógicamente se refiere a mí esta dedicatoria.
Vamos no seas ególatra, es para los tres.
--Estas equivocado Zam su nick no es ególatra, sino luzyalegría.
No puedo contigo simplemente, exclamo irritado Zam.
--Bien y cual es el problema. Cuestiono Lobo a Zam.
Humberto quiere que los tres contestemos agradeciendo esta hermosa dedicatoria.
Por mi no hay problema, déjame lugar y enseguida le pongo mis pensamientos, veras que adornada se va a dar esta hermosa mujer cuando los presuma y empujo a Zam de la banca y sacando una pluma empezó a escribir:
Norteña de mil amores y flores en tu rededor
Sé que eres sonorense y buena de par en par
Como es la carne de allá y más sin el IVA pagar
No desprecies mis versos, pues nacen para hacerte un altar.
Y si piensas que soy descarado, no dudes que por ti
hasta a el templo voy a rezar, más si la limosna esta al pasar.
Gracias por tu texto, y en la próxima revista de eros lo mando publicar.
--¿Que te parece, Zam? Soy genial, totalmente genial.
Estas loco, pero al fin eres tú lobo, que podíamos esperar.
--Vamos niño, déjame ver lo que tú escribiste.
No; mejor te leo, por qué eres capas de copiarlo y venderlo.
--Falso, pero bien adelante dijo lobo.
Zam se aclaró la garganta y ….
Mi vida es joven, es emotiva, es grandiosa. Pues en poco tiempo aprendí a reír, a que no me importara, que lagrimas surcaran mis ojos. Supe lo que era la llegada de una vida, también como en un baile, en una noche, puedes amar eternamente a una persona especial, aún que sabes que jamás será tuya, y como un premio de la naturaleza por el esfuerzo, es ver nacer un nuevo día en donde la tierra se une con el cielo, así como entendí que el amor no depende de una decisión, pues si hubiera dicho si, tal vez Humberto no sería ahora feliz.
Todo eso he vivido, mi dulce Luz y Alegría me da por saber que lo que te platico te ha hecho reír.
Zam solo puede darte las gracias, integrándote al sueño que tengo, cuando recuerdo que solo fue un momento.
Gracias, gracias.
--Está cursi, pero esta bien para tu edad, dijo un aparentemente frió e indiferente lobo, y tienes lo que ha escrito el hígado perforado del Humberto.
Esta sellado, ya lo conoces, contestó Zam.
Pues veras un truco nuevo de Lobo, mientras con suavidad tomaba un sobre, en donde estaba el texto de Humberto y lo abrió mediante…(si aquí lo escribo dejaría de ser secreto)
Decia:
Una experiencia siempre deja una cana más
Un recuerdo es parte de una arruga en el rostro
Un marca en el rostro, solo la produce las lágrimas al bajar.
Pero una sonrisa, un sueño, una ilusión
solo lo puede producir, alguien que habla con el corazón
ve con el alma y camina entre nubes de blanco algodón
Que ella en tu recuerdo, escriba una línea
Es una hermosa emoción
Pero si es todo texto ….no existe cosa más grande
Para un ser como yo.
Cuan vanas, cuan vacías, cuan breves y cortas suenan
las gracias, cuando lo que quieres es entregar todo el corazón.
Es necesario inventar una nueva palabra o mil de ellas, pero mientras tanto
usare la mas hermosa que he conocido y está es:
Luzyalegria.
Pocas personas han tenido la gentileza de dedicarme un texto, y juró que siempre he intentado corresponder con todo lo que tengo, pero mi gran problema con esta hermosa amiga, norteña, con dos ángeles y feliz de estar en la página, es que en penitencia inhumana leyó cada uno de mis textos y además ¡los comentó! Y por si fuera poco este castigo, todavía me da la gran satisfacción de recibir un regalo inmerecido, un texto dedicado.
Así que se unieron Lobo, Zam y Humberto, para que cada uno en su estilo y forma pudieran decirle:
Gracias LUZYALEGRIA
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