TE ACUERDAS
Te acuerdas, la primera vez, vestías una remera rosa con los hombros descubiertos y mi ojo se enredaba en tu cabello. Tenias puesto una minifalda verde y mis ojos buscando tu cuello, te acuerdas, encendiste una vela de silicona amarilla, tan linda, un cilindro transparente que destellaba y la penumbra detrás de nosotros. Sentada muy cerca, te acuerdas, cruzaste tus piernas y mis ojos se soltaron de tu cabello y queriendo caer entre tu mini, cayo en tu pecho, ahí se quedaron, te acuerdas, que me besaste y dijiste abre tus ojos. Mis ojos estaban cerrados y de abrirse se volvieron a tus pechos resbalando y envolviéndose como en suaves dunas, ir a la sima era calmar la sed. Te acuerdas que te gusto, y ¿tus manos donde estaban?, Mis labios entre tus pies, sorprendidos, linda luz de vela, hasta donde llegaba tu placer, mi amor, te acuerdas; y la noche bordeaba una luna grande que se asomaba a media ventana, y afuera un rosal del que esa noche recuerdo tu aroma, te acuerdas mi vida, nuestra primera ves, mis labios se confundían ante tus pies, tu cintura y tu boca; mis ojos cerrados, solo se abrían para irse, con todos mis sentidos, y con mis labios a las ganas de todo tu cuerpo, abraso apresurado de la primera ves. Tantas veces la primera vez Y ahora nunca más.
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