Vivo, muero, renazco, y vuelvo.
Vivo, por tu sonrisa, la que me da alegría, la que hace olvidar mis penas,
la que me invita a navegar por tu dulces labios.
Muero por tus ojos, calidos, transparentes, llenos de palabras silenciadas.
Renazco en tu boca, sensual, peligrosa, que me bebe entera, hasta dejarme
sin fuerzas, que me da y me quita así como así, la vida.
Vuelvo a tu brazos, una y otra vez, no puedo evitarlo, adicta estoy a tu pies.
Vivo en tu pecho, lleno de todo lo que deseo, la protección, todo tu calor.
Muero en tu cuello, perfume de hombre, rincón de los deseos.
Renazco en tu espalda, mi horizonte, mi ensenada, mi destino.
Vivo por tus caricias, muero por tus ojos, renazco en tus besos,
vuelvo a caer en deseos, eres mi cielo y mi infierno, el ladrón
de mi corazón, y a su vez su cuidador. Eres mi todo y nada,
por que me das todo y me dejas sin nada, todo te lo llevas,
todo te lo entrego, con vos pierdo mis fuerzas, por vos renuevo las mismas.
Soy una cínica que busca tus labios, encuentra tus brazos y tu
grandioso pecho, que glorioso sentimiento, este abrazo tan eterno
que no termina en tus labios, ni en nuestras almas unidas…
Un destino incierto pero hermoso nos espera, por que el destino
mismo quiso que así fuera, nos cruzo por el mismo camino,
hizo que nosotros seamos el nuevo destino, el de los
dos enamorados que fueron los primeros, pero no los últimos
que se juraron amor eterno, y hoy ya van mas de tres vidas unidos.
Que las magia nos guié siempre, y que ese sea mi destino, el estar
para siempre y por siempre así contigo.
Vivo, muero, rezando y ¿vuelvo?…