Hoy es viernes, ya es tarde, bueno una hora temprana para esta noche. Voy a una discoteca con mis amigos, unos amigos del trabajo. Esta discoteca era un poco extraña, pues todo era oscuro y transmitia una sensacion placentera, como si estuvieras en un lugar para satisfacer placeres; era increibkle la cantidad de prostitutas que habian alrededor de este lugar, y la cantidad de gente consumiendo drogas a las afueras de la discoteca. Pero mi imperfeccion, es decir, mis placeres, me llevaron dentro de este recinto, sin importarme las concecuencias que obtendria.
Una ves dentro de la discoteca, mis amigos deciden beber unos tragos, se acercan a la barra y los piden, el barman era muy serio, y los atendio de mala gana, en realidad, todo este lugar estaba repleto de gente extraña, seria, malhhumorada, pero mi inconciencia no piensa eso.
La musica no era normal, era una musica muy fuerte, tan fuerte, que unos oidos sensibles podian reventar, sin exagerar. Parecia el mismo infierno, para ser exacto. Pero mi imperfeccion, mi conciencia, no pensaba eso.
no conocia a nadie mas que a mis amigos, tan solo estaba sentado, disfrutando de la musica y mirando mujeres. De pronto, oi un susurro extraño a travez de la puerta que se encontraba al lado del bar, me llamaba, senti miedo por un segundo, pero esa voz se escuchaba tan sincera que obedeci y me adentre al cuarto...