Mi palabra no nace para morir en una tumba, nace para vivir y respirar. Mi palabra conoce el espacio en el que vive y en el que ha nacido, y también, mi palabra, conoce el espacio en el que tratan de manipular las palabras de vida, axfisiarlas. Hay palabras que nacen rompiendo cadenas, y siempre hay prisiones que quieren encerrar esas palabras. El pensamiento elige el lugar en el que quiere vivir, y por todo lo expuesto, y por la dignidad que tiene la palabra, y que debería de tener en una página literaria, dejo éstas, mis palabras, mis reflexiones ¡Y que no las muevan de este espacio! Ahí van:

La política, la sordera, la Mesa redonda y el Foro.


La imposición por la fuerza, y la violencia, en el mundo no está dando resultados en ningún lugar ni espacio del planeta. Si damos un repaso a esa política ejercida por el principal guionista y protagonista, Estados Unidos e Israel , y secundada, (por temor u omisión), por el resto de la Comunidad internacional europea e iberoamericana, esa política nos está sirviendo en bandeja la ausencia de libertad de expresión e independencia en el mundo; en los gobiernos, sobre los que pesan amenazas, si no callan; sobre los medios de comunicación, si no desfiguran la información; o sobre los particulares que disfrutan de un soporte comunicativo, porque se les niega el derecho a expresar libremente sus denuncias sobre cualquier actuación que pueda molestar el “equilibro y la estabilidad” en el ejercicio de la política de fuerza.

Hoy entraría a analizar las recientes elecciones celebradas en el Continente latinoamericano, y observamos que el vecino del Norte, opina y decide quien es el gobernante de esos países que no plantea problemas a su política de “estabilidad”.

Si analizamos otros países, también latinoamericanos, que ya han decidido qué gobernantes desean para cumplir el programa que solucione los problemas más acuciantes de sus pueblos, nos encontramos, con que Estados Unidos considera que a esos países hay que cerrarles la puerta del diálogo y las relaciones comerciales, porque desestabilizan esa “política de fuerza y estabilidad” que ellos preconizan, imponen y ejecutan, además, sin contar ni mirar a nadie, sin escuchar a nadie, y sin permiso de nadie, porque ellos no lo necesitan.

Si saltamos, en ese repaso, a la mayor de las Antillas, lleva embargada 47 años , la Administración Bush está esperando con la aplicación de nuevas medidas, y las reuniones que mantiene con la contrarrevolución de Miami, provocar una guerra civil en Cuba.

En Irak no se puede hablar ya, el diálogo quedó sepultado bajo las bombas, y las palabras nadan entre sangre y petróleo.

¿Sobrevivirán las palabras?

Otros países de Medio Oriente seguro estarán ya atemorizados ante el cataclismo vivido y se están quedando mudos. Nada ni nadie pueden frenar el desastre de la guerra y las tensiones económicas por las que se ha producido el conflicto bélico. La religión empieza a suplantar a la política en todos esos países, con el consiguiente peligro que esto conlleva para la salud de la convivencia en la vida social y política del pueblo, y en la paz espiritual del pueblo.

África, según el Ministro Sarkozy, advirtió hoy en la apertura de la Conferencia de Inmigración y Desarrollo de Rabat, a la que asisten 57 países europeos y africanos que “ el fracaso de África hoy sería el desastre de Europa”, creo que al Ministro francés la amnesia le hace olvidar la larga lista de desastres en los que con el “pacato silencio” de la Unión Europea, se están provocando en el mundo, y no es el Continente europeo el responsable, salvo que se permita hablar a todos los países de Europa, que son algo más que 26.

En la ONU están todos (los países), pero ahí solamente se obliga a obedecer a Irán, mientras algunos países se limpian los zapatos con las Resoluciones de la ONU.

Los sirios están pidiendo que se detengan “masacres israelíes”. Siria pide, clama, exige a la Comunidad internacional que “asuma su responsabilidad y detenga las masacres israelíes” en los territorios ocupados.

El grito del pueblo sirio es: ¡DETENED EL TERRORISMO DE ESTADO!

Ese grito no está dirigido solamente a Estados Unidos, sino a toda la Comunidad Internacional, a todos los países que pueblan los Continentes del planeta y a todos los que habitan este planeta.


Estamos todos sordos, y, además, hablar de política es polémico (dicen que de religión también) ¿De qué se podrá hablar?

(maravillas)