-Gracias por inspirarme con tu poesia Marìa "mortalesperoeternos".-
“…Y sigo pensando
En esta noche la lluvia es sólo un ruido
Un ruido triste y singular…”
Una vez más, la noche me encontraba fuera de mi hogar. Iluminado tan solo por la cara que la luna nos presta, me sentía atrapado, totalmente sumergido en mis pensamientos, en mis creencias, en mis tristezas.
Esta vez la lluvia era solo un elemento más en el delicado paisaje que me rodeaba, mi cuadro de vida, frágil, tan frágil como la realidad misma, esa que tanto varía según el artista, según lo dicte su locura. En esta noche la lluvia era solo un triste ruido, pálido y singular como mi delicada alma, esta noche la lluvia no podía mojarme, pues demasiado empapado de lagrimas estaba mi yo más sensible, atiborrado de golpes, dolido.
A veces la locura nos mantiene cuerdos, había escuchado en alguna parte (creo que del rey sueño), pero cuando no conocemos la cordura, y hasta la locura es reacia a quedarse a hacernos compañía, todo se vuelve muy confuso, raro… insoportablemente triste…
“… Somos guerreros en todo un mundo
Donde el dolor muestra la felicidad
La tristeza, la alegría;
La pobreza, la riqueza;
El silencio, la melodía…”
Creí que todo podía superarlo. La vida me había golpeado tantas veces y tan duramente, que inocentemente creí haber creado un escudo de la más impenetrable aleación, tan duro como los golpes que había recibido. Y es que somos guerreros en todo un mundo de incesantes batallas, donde el dolor me mostró la felicidad, y la tristeza la alegría, pues ¿que mejor inspiración para un poeta, que el dolor de un amor perdido, la tristeza de un duro abandono, o la alegría de encontrar lo bello de la vida, en lo oscuridad de nuestra existencia? Era tan solo tenerte, amada mía, lo que impulsaba mis poemas, era tan solo tu silencio, lo que llenaba todo mi ser de la más bella melodía. No había musa a la cual esperar noche tras noche, no… era tan solo mirarte, para cual alquimista convierte la plata en oro, transformar la pobreza en riqueza…
“… Estamos solos en todo un lugar
Somos un alfiler rodeado de ciudad…”
Y así deje que te marches, encerrado en mí mismo, sin darme cuenta que mi musa nunca jamás regresaría, pues ella eras vos, y vos eras ella.
Encerrado en una habitación, nuevamente al borde de la locura, comprendí que estamos solos en todo un lugar. El pánico me ataco como un enjambre de abejas, aguijoneándome en los lugares más sensibles de mi espíritu, mi frágil alma volvió a ser frágil desde el primer instante en que te fuiste, pues nunca había sido fuerte, excepto cuando estabas cerca de mí.
Desesperado salí a buscarte al comprenderte musa mía, pues que es un poeta sin inspiración, sino un hombre que suele escribir incoherencias en un papel, que vació queda al final, y se pierde con el polvo del tiempo.
La lluvia incapaz era de mojarme, pues esta noche era un triste ruido, vacío y singular, pero ¿como iba a encontrarte, si somos un alfiler rodeado de ciudad? cansado de buscarte me rendí ante la luna, me rendí ante la locura, me rendí ante la tristeza, me rendí…me rendí…
“…Somos solo una luz esperando aparecer
Somos una semilla esperando a crecer…”
La luz de la luna ilumino mi triste cara en un charco de agua claro como un espejo. Me sentí débil, solitario, incapaz… entonces tan solo me levante y me marche, caminando tan despacio como me era posible, pues no había apuro alguno ya en mi vida, sino que tenía todo el tiempo del mundo porque debía comenzarlo todo de nuevo. Y si alguno lo llama instinto de supervivencia yo disiento de el, porque para mi es simple amor hacía la vida, ese deleite de hacer vibrar los sentidos, ese placer de saborear el arte por completo, no escribir por escribir, ni morir por morir, sino morir por escribir…morir escribiendo.
Aun somos niños, débiles y sensibles. Somos una luz que espera aparecer, somos una semilla que espera crecer. |