Luna,
solitaria y mensajera
maniatada por el cielo,
condenada a ser la luz
que ilumina la espera
del amante que no duerme
que acaricia los momentos
de los que las noche es dueña
y de oscuridad envuelve.
Estrella,
tan lejana y consejera
los deseos que te he pedido
y siempre han sido por ella.
Y aunque aún no estoy vencido
cada día me duele más
el saber que no la tengo
porque sin ella no vivo.
Texto agregado el 01-07-2006, y leído por 201
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Lectores Opinan
10-07-2006
:( resulta triste y bonita quizas porque no hay nada mas bello que la melancolia arikelilla