El día que decidas olvidar . . . el amor que no tenia que ser, que nunca tuvo que haber nacido.

El día que decidas dejar . . . de buscar amores ocultos para disfrazar tu dolor, amores que lastiman y que humillan.

El día que decidas tratar . . . de resucitar el amor que (no se por que motivo) destruiste, o aunque sea, convertirlo en amistad.

El día que decidas ser valiente . . . y te atrevas a hablar con la verdad, y asumir las consecuencias de esto, y dejar atrás la cobardía, la mentira, el engaño, la traición, el dolor y la oscuridad.

El día que decidas hacer algo . . . por pequeño que sea ese algo, para tratar de reparar el dolor que causaste a algunas personas y personitas.

El día que decidas prender . . . la luz de una pequeña llama, para alumbrar el camino que te saque de la oscuridad.

El día que decidas . . . recuperar la voz de tu conciencia, la inocencia de tu niñez, el perdón (para dar y recibir) y un poco de culpa y remordimiento por el daño causado, disfrazados ahora de quien sabe qué.

Ese día . . . van a empezar a ocurrir algunas cosas.

Tu ángel guardián va a recuperar la alegría, y va a estar encantado de ayudarte a lograr lo mismo.

Voy a dejar de ver la oscuridad en el fondo de tus ojos, que solo muy pocas personas pueden ver.

Tu espíritu, alma o como quieras llamarlo va a comenzar a elevarse desde las profundidades del abismo en donde lo sumergiste.

Vas a encontrar el camino correcto que tenés que transitar, para encontrar la PAZ interior que tanta falta te hace, a través de la humildad de corazón.

Esa PAZ que deliberadamente quitaste de tu vida y de la mía.

Vas a saber que el camino para encontrar la humildad necesaria, es muy difícil, por que hacen falta unos cuantos sacrificios propios, y que no cualquiera está dispuesto a ofrecer.

Por que yo hice todo lo que hice, por que estaba equivocado, por que estaba ciego y no quería ver (hace mucho tiempo) que tenía que ayudarte en vez de lastimarte, en vez de hablarte como te hablé.

Por que todo lo hecho por mí en los últimos tiempos fue a consecuencia del dolor que causa la mentira, el engaño y la traición, que destrozaron mi corazón.

Por que es difícil para mí, encontrar también la PAZ, que tanto necesitamos, y que ojalá DIOS nos ilumine con su sabiduría para saber encontrarla.

Por que no sé si ellos (los que dominan tu corazón) te van a dejar leer hasta aquí.

Por que decidí tratar de caminar solo en la vida, aprendiendo a llevar mi cruz con el corazón herido, por tu falta de sinceridad.

No sigas lastimándome, humillándome, por que haya hecho lo que yo haya hecho, no creo merecer tanta maldad y no aprendí nunca a defenderme de eso, por que mi defensa me lastima a mí y te lastima a vos.

Solo soy un hombre, que amó mucho, tanto que no podía ver en vos la maldad, solo veía tus cualidades aunque a veces te dijera lo contrario, soy un hombre que no puede recibir tanto dolor y tanta humillación.

Soy un hombre simple, que ama las cosas simples y sinceras de la vida, un hombre al que le cuesta horrores mentir.

Un hombre que a través del dolor se convirtió en aprendiz de escritor