©EL BOSQUEJO
DE LA ÚLTIMA LÍNEA
DE TU CUERPO

©luisangel_cm@hotmail.com
(Tacna-Perú)

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A “nadie” en especial.
Tal vez sólo fue otro sueño.

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Inclina un poco la cabeza, así, y mírame de frente,
que el sol bañe tu rostro de costado ¡Le da un brillo mágico y especial!

Por favor, no te muevas ¿No ves que trato de dibujarte?
No frunzas el ceño (me da tanta risa cuando a veces lo haces e inflas las mejillas en berrinche), prefiero verte serena, y tranquila como esperando el amor.

No, insisto. Prefiero que sea de pie, apoyada con los brazos y junto al espejo.
Para que tu propio reflejo se despinte ante mi lápiz.
¿Qué? No, no voy a dibujar el paisaje de fondo, ni la columna, ni así la ventana.
La belleza divina no se combina con la naturaleza, ni con la obra humana.

Trata de sonreír, y procura que tus labios no tiemblen.
Sí, sé que dibujar tus labios sin rojo es difícil.
Pero descuida, haré que el trazo sea perfecto, aunque tu sonrisa siempre sea gris.

No te preocupes, que no borraré tu lunar, pero no me pidas que dibuje esa arruga en tu frente, ni aquel barro en tu nariz. Porque acaso ya no serás tú la de mi sueño, sino la luna espectral que mueve las mareas, al son de mis latidos.

¿Podrías evitar parpadear? Necesito captar tus ojos claros, y ninguna lágrima es bienvenida en este papel.
No me mires así, por favor, no es ninguna broma ¡En verdad eres preciosa! La musa silente en la inmensidad de este boceto.

Sé que corre una brisa tibia por la tarde, pero, créeme, tus cabellos y su finura quedarán mejor al viento, libres.
Te juro que las líneas serán suaves, y aunque me demore horas, cada hebra será tuya...

No importa cuanto me apures, falta poco para la noche.
Y en la oscuridad, entonces, no podré verte, tus cabellos, tus ojos, tus facciones.
Te dibujaré al tacto.

Y tal vez ya no sólo tu rostro, sea el prisionero de los trazos hechos con mi piel...
sino también tu cuerpo.

Tacna, 21 de junio 2006