Amar y no hay amor

Eran las 5 de la mañana aproximadamente; sus ojos se abrieron de repente. Súbitamente, una lágrima rodó por su rostro y se dejó perder en la almohada… giro entonces su cuerpo, como tratando de olvidarlo todo, de protegerse de aquella torpe y cruel realidad, respiro profundo, dirigió su mirada a ese punto en el infinito… se aferro a la almohada y como un niño pequeño se echó a llorar; sin consuelo. Cerró sus ojos nuevamente para sumergirse en un mundo diferente, para olvidar que ya estaba en el olvido, que estaba solo, totalmente solo, perdido en el universo de su cuarto, su hogar, su mundo… Pero algo dentro de si, le pedía no perderse, amar mas, mucho mas

LA NOCHE ANTERIOR

Se miró al espejo, tomo su peine, lo llevo a su pelo y trato de arreglarlo, dio media vuelta, vio cuerpo de arriba abajo, se sonrió, tomo las llaves de su carro y salio corriendo.
Entró la llave en el encendido, volteó hacia su apartamento, vio una luz encendida… no recordaba si la había apagado, quiso bajarse, pero ya estaba tarde, así que prefirió girar la llave y dirigirse al Quenn’s, bar en donde lo esperaba ella, tan anhelada mujer, por fin había aceptado su invitación, hecha hace algo mas de medio año, lo recuerda, por que ese día la vio irse de la mano de Joaquín, su mejor amigo.

Llegó, sintió que su respiración se agitaba y que dentro de su corazón tenía algo semejante a libélulas mutantes, se habían cansado de estar en su estomago durante todo el camino al bar, entró, eran las 9 de la noche en punto y ella ya estaba ahí, la vio tan hermosa, como sólo él la podía ver, tenia una lagrima negra en su rostro, lo que mato las libélulas mutantes en su corazón, se acerco con desespero y algo consternado…

- Hola! - dijo con miedo profundo; ella no lo descifró.
- Hola, como estas?
- Bien, bien, pero tu? Porque lloras? - Lo dijo con una ternura tremenda, y ella fría, dolida y sumergida en otras cuestiones…
- No es nada, no tienes porque preocuparte, hay cosas mas interesantes que hacer por aquí, allá ( y le señaló una mujer) está mi mejor amiga, la que tu sabes que esta tan interesada en ti (…) acepte esta cita para que pudieran conocerse, se llama Juana
- Pero, yo vine por ti… y no me digas que no lloras por nada - dijo, como aforrándose a que fuera una broma.
- ¡Te dije que no me pasa nada! Cual es tu problema? Mírala, ella, bueno, no es tan hermosa como yo (en un tono petulante que él no le conocía) pero tiene algo no? No te parece?
- Si - lo dijo con rabia, quiso arrastrarla y mandarla a volar lejos, se reía dentro de si mismo… cosas que pasan en esta vida, y tanto tiempo de admirarla y no es más que un animal.
- Dijiste algo?
- No, estaba pensando en voz alta, en fin, fue un desastre conocerte, espero no vuelva a suceder, con razón Joaquín se fue con otra…-Dijo en burla y se fue con su maliciosa sonrisa.


Esta mujer se quedó consternada en su idiotez y no supo con qué cosa responderle, así que lo único que acertó a decirle, fue payaso! En un tono de ignorancia que a él le hizo más gracia, a lo lejos pudo ver nuevamente a Juana, ella no era como los demás, estaba sola, en silencio, pero él prefirió marcharse, ella lo vio irse y se sintió triste.

Salió del bar bastante aburrido de la situación, se subió al carro y volvió a casa, de pronto, desde su alma, sintió unos profundos deseos de llorar, pero no entendía el motivo, pensó en Juana, la dejo sola con ella, la malvada; se sintió culpable también, pensó en regresar al bar, pero no lo hizo, el sabrá porque.


LA NOCHE DE JUANA

Estaba leyendo a Gabo, cuando golpearon la puerta, era ella, la mujer a la que estaba empezando a odiar, pero la hipocresía de vez en cuando era conveniente…

- Hola, quemas? – Dijo Juana
- Hola, hoy no tiene nada que hacer? –Fue entrando a la habitación – jajaja, que tonta, tu como vas a tener algo que hacer? Si tu estas sola, ah, no, estas conmigo y por eso hoy vamos a ir al Quenn’s.
- Jaja… al Quenn’s? que le pasa? Usted sabe que mi esos planes no me interesan en lo mas absoluto
- No importa, iras, tengo que quitarme un peso de encima
- Idiota!
- Iremos y punto! Y si no se te da la puta gana ir, sabes bien que puedo destruirte.
- (…) es la ultima vez, después, en verdad haré lo que se me de “la puta gana” (en un tono irónico, bastante bueno por cierto)
- Como quieras mi querida…
- Lárguese, nos veremos allá, ver su cara me daña la noche…
- Jajaja… nooo que te pasa? Hoy tienes que verte más fea que siempre, no será una tarea difícil.
- Perfecto, váyase!
- Esta bien, confío en tu mal gusto de siempre!!
- Adiós!!!

Suspiro Juana, por fin la idiota había sacado las garras… tenia tanta pereza de ir a aquel lugar, Gabo es simplemente mas interesante que ver a gente hueca pasearse por aquellos lugares… suspiro nuevamente y pensó en el.

Llego al bar a las 8:30 de la noche y allí estaba la malvada mujer, se enojo tanto, su novio no hacia más que mirar a Juana, y ella, aprovechando se vengó, seria lo ultimo para que la dejara en paz, tomo unos tragos y hablo con aquel hombre, la malvada se dirigió a la barra y se puso a llorar, Juana río felizmente, y le dijo al hombre que fuera con su novia, entonces el se río también y le dijo que no, que estaba mejor en su compañía; pero Juana insisto casi en un tono hiriente, así que el hombre simplemente se marcho.

Y de pronto entró su príncipe, pero ni la volteo a mirar, Juana simplemente se dejo derrotar.
Se marcho, él ya no estaba por ahí, regreso a casa y se perdió en los recuerdos. Deseo desaparecer.


LA MAÑANA SIGUIENTE

Se cruzaron, se vieron, se miraron… pero no dijeron nada; Juana se acerco, y le dio una flor de papel, el hombre no supo que hacer, se quedo como petrificado, Juana pensó que lo había asustado, de modo que se fue corriendo, de pronto él en un momento de lucidez quiso buscarla.
Pero lo entendió, no se trataba de amor.

Nuevamente se vieron, se miraron, el estiro su mano, y

- Hola, soy Millar, lo siento, por favor, perdóname. Te necesito a mi lado
- Hola… no, no te preocupes hay cosas que simplemente no son, y no porque no queramos, si no porque llega el momento en que ya no puede ser. Perdóname tu a mi
- Intentémoslo
- Estas seguro?
- Si
- Caminar a mi lado no es fácil
- Ni será suficiente, quiero estar contigo, simplemente quiero abrazarte.
- Hazlo

Y se abrazaron y se sintieron, pero no se amaron, y no porque no pudieran, ni porque no quisieran, es solo que ya no era posible.

Y pasé yo en tu vida, mil veces y otra más…
Pero no viste.
Ya no me puedes amar;
El tiempo ha pasado
Y en silencio te pido
No te dejes derrotar,
Inténtalo una vez más.

“Por un resto de amor
abrió su puerta un día
y echó a volar echó a volar...
Por un resto de amor
el mundo parecía
estar en su momento
Sé que estoy a tiempo, dijo
podré aprender podré cambiar
Por un cuarto de amor
se encerró en su vida esclava
y la brisa se hizo viento”
Miguel Bosé - Sara