Al comensar el dia, oh sorpresa EL estaba ahi con una mirada firme leyendo el diario en la sala de estar y llamando en voz alta a mi hermano mayor y a mi nos decia que ya quedaba poco tiempo para sentarnos a la mesa para tomar el desayuno.

Hoy iba a ser uno de esos dias de fin de semana en que nos divertimos fuera de casa, y de hecho asi seria, luego del desayuno procedimos a despedirnos de mi madre que se quedaria en casa haciendo las cosas propias de ua madre, nos alistamos con todo lo que pudimos cargar en nuestros morrales, pero en la inspeccion ocular que realizo EL a nuestros morrales previa ala salida de nuestro hogar quedanos bien ligeros de peso.......

Nada de juguetes, caritos y nada que se le paresca dijo EL, solo un paquete de galletas de soda una botella de agua una muda y nada mas. Y nos enrrumbamos hacia el paradero del omnibus que nos llevaria a nuestro destino, el cual por cierto no lo conociamos todavia, las primeras horas de horas de caminata en ese lugar llamado el planetario que esta cerca al MORRO SOLAR fueron no muy extenuantes por el contrario nos estabamos divirtiendo de un modo muy particular....

Al promediar las 11 am estabamos en la cima del morro luego de sortear unos policias que custodiaban dicho lugar y que gracias a que EL era militar en actividad pudimos cruzar las tranqueras continuando la caminata, descansando, investigando y muchas cosas mas que podemos hacer tres hermanitos de 7, 10 y 14.

Ya sin agua y sin galletas las cuales se me acabaron en el omnibus, y siendo casi las dos de la tarde estabamos en una playa hermoza y totalmente desolada a las espaldas del Morro muertos de hambre no habia madie ni nada que comprar y no sabiamos por donde ir, hacia donde Avanzar, es verdad estabamos predidos.

Luego de caminar por la orilla de la playa durante un par de horas entre risas y angustias llegamos a toparnos con un par de pescadores solitarios los que nos dijeron que caminaramos en linea recta opuesta a la playa y que al cabo de media hora encontrariamos una zona urbana.

Y asi fue que nos retiramos de las lindas orillas y a la vez que nos retiravamos pudimos apresiar en forma espectacular la puesta del sol, ahogandose en las calildas aguas del mar y nosotros langideciendo pero alentados por EL que hacia gala de su fortaleza y resistencia militar, nos sobreponiamos a todo cuanto se nos cruzara en nuestro camino.

Luego de la experiencia de la caminata sin rumbo que realizamos nos quedo el gran consuelo que mis hermanos y yo lo tenemos a EL para que nos cuide y nos enseñe cosas y a la ves experimentemos cosas nuevas juntos como debe ser.