Lo supe cuando me mirabas por largo rato, lo supe cuando no quisiste que clavara la mirada en ti, cuando veía mis ojos reflejados en los tuyos. Lo supe cuando me rozaste, cuando acariciaste mis manos, cuando abrazaste mis abrazos.

Y sentada observo el atradecer por una ventana, imaginandote aquí conmigo. Dime que el amanecer que dejé reflejado en aquella taza de café séguirá ahí cuando, nuevamente, me vea encvuelta en tus brazos. Hazme saber que no te estas arrepientiendo en este mismo momento.

El sol ya se ocultó, y el cielo tiene esos tonos grises con los cuales yo te conocí...Y siento que algo me falta, siento que dejé pedazos por donde pasé, y te recordé en una fracción de segundo y estubiste en mi mente por el resto del día.

Y quisiera que lo días fueran eternos hasta volver a verte y así poder ver un último atardecer y vivir un nuevo amanecer contigo a mi lado.

Aveces deseo no verte, ni siquiera mirarte pasar. Pero todas esas veces tengo frio y por eso otra parte de mi te quiere conmigo.






Y aún recuerdo los días en que tu recuerdo corta como navaja recién afilada...
Lleváme a un país donde nada nos separe y estemos juntos siempre...