Conocí a un hombre con el mundo a sus espaldas. Conocí a un hombre con las manos hechas llagas. Era soñador. Era un pensador. Vivía sin mas compañía que la de la soledad. Vivía sin mas compañía que la de los años pasados sin piedad. Sombras en su risa. Luz en su pesar. Lo ví sentado vagando en su mente. Lo vi sentado proclamando su muerte. Si... Lo vi mirandose al espejo. Lo ví... mirando mi reflejo.
Texto agregado el 16-06-2006, y leído por 1998 visitantes. (9 votos)