Miles de tensados nudos marinos
Atrapan las miradas en tu puerto
Persiguiendo el esbozo delicado
Modulando la belleza en tu cuerpo

Tiemblan las manos queriendo tocarte
Provocando floraciones de frutales injertos
Y otras osadías de instintos abismales
Que yacen ocultos en tu aliento de diosa

Tantos detalles guirnaldan nuestro sexo
Nutren estas ganas desesperadas de cantarte
La sed de ti que crece en cada pensamiento
Buscando las cristalinas aguas de tu cuerpo


Tus muslos

Tersos mullen mis ojos tus muslos
Torneada paz de perlada hermosura
Evocan la intensidad de mórbidos placeres
Macizos y aun se amoldan y acarician

Sonrientes pómulos en sus semblantes
Piden con repetida dulzura tus piernas
Lisonjas de música viva y suave ritmo
Piano acariciado con dedos en su teclado

Columnas sólidas, densas bellezas
Brillan sus arenas a punto de ser cristales
Soy olas que vuelan orbitando las texturas
Suspendidas en la dulzura de su corteza

Escalo tus piernas aferrado a besos
Soy el caracol de escondidas gulas
Dejando rastro de lamidas babosas
Tu piel dulce manjar que me enchula

Circunvalando las envuelvo de caricias
No me canso de la espalda de tus muslos
Repaso sus planicies suaves y sensibles
Y bebo del arroyuelo detrás de las rodillas

Hechiza el aroma que transpiran tus ganas
Mi lengua recoge sabor de chorrillos húmedos
El interior de tus muslos es gloriosa carne
Y la piel de mi nariz ya roza tus nubes


Tus senos

Del paraíso de tu torso dos ninfas nacían
Y de tan hermosa que vieron te hacían
Prefirieron quedarse siendo tus senos
Para darme a beber tus placeres desde ellos

Siempre más y más, quiero más sorberlos
Casi azules, palpo que son de bellos tus senos
Inducen danzas y contagian alegría de estrellas
Discretos frutales, colmada pulpa de terciopelo

Templada aura de ocres colores australes
Rodean la aurora que son tus pezones
Boreales nimbos entonan la piel de su canción
Trocitos de labio, penachos de algodones

El pastel de sus colores oscurece con entusiasmo
Apuntan y disparan los senos el ápice de sus lanzas
Son dos pupilas que invitan y desafían al pleonasmo
Rasgan el iris de los ojos, hienden y llenan de esperanza

Alas son tus piernas cuando toco tus pechos
Tesoro entre mis manos al llevarlos a mi boca
Se mueven sin moverse con pausada marea
Bailan con la apretada rigidez de dos océanos

Ablandan disolviéndose en salivas de mi lengua
Así las bebo, gula que desborda por las comisuras
Vuelo tu torso para volver a hundirme en tus pozos
Extracto divino, sangre de ninfa que me seduce


Tus nalgas

Santuario son tus nalgas
Un gran corazón dibujan
Deseosa a tu dios te regalas
De espalda y en cuclillas

Perfecto monumento elíptico
Desde la pronunciada cintura
Se desprende dibujando curvas
Simétricas contornean tus caderas

Maravilloso y sublime culo
Musa glútea, de frutales grutas
Arrodillado te hago culto
Y enciendes mi vela hirsuta

Romboide de suaves aristas
Separa muslos en ébano tallados
Portales de mágicas alas hinchadas
Estela tu vulva del estrellado ano


Tu vulva

Alegres ondas de aguas dibuja tu estuario
Delicada tormenta bordada en las carnes
Brota en manantiales abrigados de muslos
Despide sabor litoral, a puerto y suave malva

Ojo ciego de grandes e imprecisos parpados
Pupila rosada y bruñida en secreto me guiña
Tímidas lágrimas de alegría y entusiasmo
Enjuga y refresca carnaval de regocijos salados

Plegadas brillan esculturales alas enceradas
Misterioso paisaje desértico, playa sosegada
Trazos ondulantes mueven huellas en la arena
Agua de placeres, vientos de lujuria desdibujan

¡Oh musa de hinchada y carnosa vulva!
Develas los misterios creando nuevos
Oscura luz emanan los placeres nuestros
Abrazado entre tus piernas me arrullas