(no había categoría "fluir de la consciencia", por eso puse "narración")
Mientras afuera la lluvia cae como lágrimas arrancadas con la fuerza del viento tú, fuego, iluminas mi habitación y mi alma. La vela es el sostén de tu magnífica presencia el corazón que aprieta a cada segundo este espíritu. La lucha de sentimientos bañan tu tibieza uniéndome a ti haciendo cada segundo más cercano tu ardor a mi piel creando un pacto mágico siendo tuya y tú mío... somos uno, volaremos en canto ardiente ni el temporal de afuera nos apagará, la gente nos verá sin vernos seré la ceniza que quedará luego de tu paso, seré el carbón, la lava, la voz que gritará a cada segundo que tú estás, seré tu alma, tu vida y tu pasión, seré parte de tu feroz paso por el mundo... algún día me uniré más a ti seré el humo que huirá buscando un aire que no deseo... mis cenizas esparcidas por la tierra serán tuyas porque yo soy tuya me entrego a ti fuego mío me entrego a tu fuerza, tu poder, tu ira.
Sentada en mi cama contemplo la vela cargada de pasión amándote, deseándote, sabiendo que en el momento de mi fin sólo tú podrás cubrirme, acariciarme, quemarme lenta y suavemente... para ser ceniza. |