Me aproximo sin ningún tipo de control a un mundo hace tiempo extraño para mí; evado toda clase de realidad que me aporta la rutina y me embarco en una navegación extraña por páginas que me entregan toda clase de enseñanzas.
La sucia bicicleta que por falta de tiempo no limpié. En realidad por falta de ganas, ya que mis pensamientos, mis ganas de expresarme, mis ganas de escribir evaden toda responsabilidad que todo acto material que se quiera conservar necesita.
Nunca supe montar muy bien en bici pero estoy aprendiendo; y la vida, las enseñanzas, las experiencias hacen que nunca la abandone.
Me monto en ella y aspiro la luz y la brisa que recorre y da dulzura y brillantez a mi fina piel.
El Sol me da tan fuerte en las partes del cuerpo no cubiertas que mis ojos no ven más allá de las baldosas amarillas que voy recorriendo con mi bicicleta.
Sé que no me voy a caer y si me caigo me da igual.
Sabré que la maniobra que hizo que me cayera no la voy a tener que volver a repetir.
Recorro muchos sitios; de algunos me canso, de otros me maravillo y, me paro a descansar en este. Estoy cansada de siempre ir a parar al mismo lugar; no me disgusta pero creo que ciertas superficialidades que abundan por ese lugar no me interesan mucho; hay momentos, situaciones, paisajes, fotos que no son así pero después de observar mucha belleza si se llega a atisbar algo crudo o superficial te ahoga en un estado profundo de tristeza.
No es justificación del porqué estoy aquí; sólo son ganas de escribir.
Me recuesto en mi césped y observo a los elefantes voladores; sé que me sonríen, eso no me lo quita nadie.
Es demasiado hermoso ver a alguien como es feliz haciendo lo que le gusta aunque igual no sea lo correcto.
Y ellos tendrán muchas cosas pero no son egoistas ni envidiosos y les encanta verme contenta.
Yo les sonrío también de forma cómplice. Nos conocemos desde pequeños.
Bajo la vista.
Tecleo con mi boli o lapiz unas teclas imaginarias mientras siento que alguien me escucha.
Termino de escribir, termino de llorar, de reir, de autoinvitarme a conversaciones, de imaginar.
DE SOÑAR.
Y cierro los ojos y sueño con la mente sin intervención alguna de seres imaginarios que circulan por la red.
Me adentro en un mi mundo; de realidad?
Mi fantasía siempre tiene un nexo de unión con la realidad.
Y observo seres transparentes para mis ojos que me dan la bienvenida, me alaban lo que he puesto o me critican ciertas palabras puestas por lo mal escritas que están o porque simplemente no les gusta.
Ese es mi sueño y deseo que así se cumpla...
Y deseo aprender...
BIENHALLADA.