Desvelos del alma.

El joven apasionado no puede dormir, el amor de su vida tal vez se encuentre en el mismo bar, tal vez acepte el día de hoy. Noches interminables fueron aquellas en donde el joven se desvelaba para poder conseguir una frase que agradara a la chica.
Día tras día en su pensamiento, solo rondaba aquella chica de la cual no podía escapar, había quedado hechizado por sus encantos.
Día con día pensaba y pasaba las noches en velas pudiendo idear algo que en verdad la impresionara, algo que dijera: mira estoy aquí.
Tal vez estaba solo en la simpleza de una rosa roja rodeada de blancas para darle contraste. O en un poema, tal vez, aquellos que en sus sueños imagino pero que durante un largo tiempo nunca pudo decirle.
Hoy no puede dormir le ha dicho a la aquella chica lo que su alma siente, lo que su corazón manda y lo que su cabeza necesita.
Cual será su respuesta? Le habrá si quiera gustado lo que le dije? Es que cambiara su percepción de mi?.
Aquellas preguntas hoy no pueden salir de la mente del joven que desesperado esta por no saber una respuesta.

Una noche igual a las demás, pero esta vez la chica no puede dormir, un joven le dijo que sentía mucho por ella, pero ella, indecisa, tal vez ingenua no sabe que contestar.
Han sido palabras sumamente hermosas, el joven no es ni tan mal sujeto, la ha complacido siempre y ha hecho que se sienta especial, pero dentro muy dentro de si, sabe que no es el hombre que busca para ser su pareja.
En la noche despiadada la chica no ha podido consolar el sueño, no sabe que es lo que tiene que hacer. Vueltas en la cama, gira, simplemente sus pensamientos son mucho más fuertes que el silencio que gobierna la noche.
Por que arruinar la relación tan bonita que teníamos? He de elegir entre un amor y un compañero de vida?
Su corazón hoy no tiene dueño, o tal vez alguna otra persona, pero no él.
Como poder conciliar el sueño si el amor la ha confundido, como poder empezar a soñar sino sabe como decirle que el no es para ella. Si no sabe de que modo poner en orden las palabras para no herirlo.

En la noche, dos jóvenes unidos por una carta, pasan la noche en vela, estan pasando desvelos del alma.

Ser ahi