La serpiente te lo dijo
El veneno que tragaste, tormentosa,
Los segundos estirados de la noche
Te tocaron los tobillos,
Y al final te lo creíste,
No hubo un ángel susurrándote al oído
Y ese rey pequeño que adorabas
Te abandonó en la vigilia
Se llevó los violines del crepúsculo
A su propio paraíso.
La serpiente siempre dijo la verdad
El que desangró su vino en tus rincones
Fue el mismo perro que te mordió la mano,
Entre caricias y limosnas.
Tic.tac.tic.tac.tic.tac.
Texto agregado el 02-06-2006, y leído por 147
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