Los noventas años de mi abuelita (así le gusta a ella, cuando no anda con los tontos) reunieron a la familia como en los viejos tiempos, nunca hemos estado separados, pero antes éramos mas choclon, mas familia, habían mas guitarras, cantábamos mas, jugábamos mas con bombitas de agua, nos reíamos mas … igual volvió a ser todo casi como antes, y pensé que me da un poco de miedo cuando mi abuelita no este mas, por que ella es el nexo entre muchas cosas, ella es fundamental en mi núcleo, nunca he pasado un año nuevo fuera de casa, por que jamás podría no pasarlo con ella, es demasiado exquisita mi abuela, aparte esos ojitos como de pena, esos ojos de cuando los abuelitos tienen cataratas no se, pero que da esa mirada viejita, vidriosa, y es chiquitita, parece que se va a quebrar cuando la abraso, sus manos , toda ella es tan viejita y la veo envejecer cada día mas rápido y me duele el pecho pensar que un día puede que no este mas, y es un pensamiento recurrente por que a los 90 de alguien se piensa, yo no quiero que se vaya nunca, siempre quise que me viera con hijos no se por que, pero me gustaría, me gustaría hacer tantas cosas con ella y el tiempo se escapa, es por eso que cada rato que puedo estar con ella lo estoy, hago cosas increíbles que con mi cara de seria nadie cree que haría, solo para hacerla reír y es que adoro cuando se ríe con ganas, me dan ganas de comérmela, o cuando sale con sus cosas raras, cuando dice algún modismo que algún nieto le pego, es completamente adorable, no es fácil de soportar, pues tiene su carácter, no solo de ahora, siempre ha tenido un carácter fuerte, pero ha sido lo que le quedaba hacer, pero ahora me gusta que se relaje mas, que se ría mas, que de opiniones mega modernas para su dinosauria edad, adoro como me guarda los dulces, envueltos en una servilleta, amo sus manías de tener cierto tipo de bolsas para ciertas cosas, sus gestos para hablar de algunos temas, como se guarda el pañuelo, como tiene que lavarse las manos por todo, que siempre guarde todo para salir, y nunca sale, sus vestidos olor a closet añejo, la forma de cerrar la puerta, que el cuchillo de la mantequilla siempre tenga que ir de una forma, que la mantequilla se tenga que sacar parejita por que si le hacen hoyitos se enoja, que resé para que gane la católica si es del colo, solo para que su nieto este feliz, que me diga loca, la adoro entera y me parece fantástico que haya llegado a sus noventa años así de linda.