Los árboles sacuden impacientes
la madrugada de sus hojas
y empiezan a brillar con la luz del fuego cercano
una ventana abierta deja ver al hombre
que hace un rato bajó de la noche y me guiñó un ojo
y esa mujer sonriente sigue mirando sin ver
algunas toses de ginebra
los ruidos de la calle que despierta
una mesa de pájaros se extiende por la plaza
se escuchan risas
música
y voces
las ganas de bailar me inundan como un río
me digo que es muy tarde
la lejana fogata crece en brillos
en la vereda caen saludos
encapsulados
y muertos
lo bueno está por comenzar
sé que después de todo
finalmente
podré bailar con ella
camino solo
me paro a ratos para
observar
la fiesta prometida.
.
Texto agregado el 28-05-2006, y leído por 233
visitantes. (6 votos)
Lectores Opinan
04-06-2006
Gracias por guiarme de tu mano por esta fiesta que promete... Laura :) MariaL
01-06-2006
Me gusta la atmósfera que se dibuja en tu poema. Me hace perderme en una calle cualquiera adentrándome en la noche a la vez que en las casas por las ventanas abiertas. m_a_g_d_a2000
31-05-2006
La fiesta fue leer tu poesía, qué hermoso, parecía que estaba caminando a tu lado, disfrutando de ese momento irrepetible. Siempre lo bueno está por venir. Besitos y estrellas. Magda gmmagdalena
29-05-2006
Tienen una cosa tus textos... uno se siente ahí, viviendo lo que pasa... sintiendo, oliendo, transpirando...
Disfruto leyéndote, amigo!!!
elnegropablo
28-05-2006
lo bueno está por comenzar...la fiesta prometida...las ganas ...inundan como un río*****
buglione-escritora