Ya no se mira a los ojos

- Ya no me gustan los rostros, tienen ese no se que, que solo me deja un aire de melancolía -

Él estaba sentado con una cara diferente a la del resto. Tan frágil, tan anciano, pero como si fuera un bebe, tan ingenuo y con la simplicidad en la que se puede advertir un dejo de felicidad. Como si ya lo conociese, si tuviese el recuerdo de ese rostro de toda mi vida.

- Sigo observando a todos con aire curioso -

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Poema para quienes miran a los ojos, esas pocas personas que chocan con sus pupilas las mías y me atraviesan el iris con su verdad.
A veces aparecía como el verdadero amor, que se trasladaba por el aire de mirada en mirada buscando un corazón caliente en el cual quedarse.
Como mi padre y madre.
Sentía esa presencia y algún pulso me decía que era diferente.