Existen en la vida millones de situaciones que envuelven tu sensibilidad, momentos que marchan constantemente dando continuidad a un ciclo que por lo general se torna vicioso.
Te asfixias y nadas hasta la superficie para tratar de respirar un poco de aire puro y sientes que debes sumergirte nuevamente basado en un instinto de autoprotección o autoflagelación, términos que en ocasiones pueden emplearse como sinónimos.

Por mi instinto de autoprotección he sido víctima de mis propias flagelaciones existenciales, limitando algunos momentos de mi vida a una serie de secuelas de lo que pude hacer. En parte desilusiones y traumas han cegado decisiones por el miedo que trae el riesgo.

En algún momento y por una sinrazón comienzas a evitar tu verdadero camino para buscar "opciones" que consideras más seguras, basándote en la reflexión de que "no existe riesgo si no te involucras del todo". De esta forma abres la puerta que te lleva del AQUI hacia NINGÚN LADO.

Rodeándote de todo lo que "evitas" aseguras no ser parte de ese mundo que tanto rechazas, dando inicio a una nueva martirización en la que tu autoprotección te autoflagela.
En búsqueda de evolución caminé por las mediaciones de lo real y lo surreal, llegando a un punto donde abstraído en la sensibilidad me conecté con un ser que lleno de empatía abrió su coraza invitándome a desnudarme también. Atónito y desnudo ante sus palabras, atornille centellas de luminosidad y admiración por el milagro presenciado.

Mi naturaleza hedonista quedó saciada en loas tres principales vertientes del placer. El placer espiritual quedó cubierto en un encuentro magnético que me llevó al éxtasis intelectual. ¡Placer intelectual! tan difícil de obtener como fácil de aceptar. Placer físico, se resume en fuego, afición, magnificación y satisfacción. ¡Placer! hedonista ante la más bella muestra de perfección que me hace desprenderme del entorno y la búsqueda a tal punto de bordear el arca de lo insuperable.

¿Para qué intentar otra búsqueda?, sería una decepción anticipada que solamente ensuciaría los recuerdos de la firme perfección...
Tan perfecta situación, tan perfectas palabras, tan perfecta mujer... Aseguro que es mejor recordarlo que vivirlo con otra persona... Es sólo percepción mágica en búsqueda de la repetición innovadora constante".

Explico algunas cosas... Las expliqué aunque ahora todo lo que vi en un sueño luego lo contemple en cenizas imposibles de salvar...