OTRO FINAL PARA “ROMEO Y JULIETA”

- Nos están haciendo la cama (1) Romi: si no paramos la pelota ya, somos boleta. (2)
- ¿Te parece, Juli?
- ¿Qué si me parece? ¡Esto termina como el culo! (3) Somo fiambre, somo. (4)

Tal el diálogo entre los amantes de Verona.
¿Quién creen que se salió con la suya? ¡Julieta, por supuesto!, así ha sido y será siempre en la historia de la humanidad, y debemos reconocer que en esta oportunidad la mujer tuvo razón.

Lo cierto es que los jóvenes lograron evadirse de la trama urdida por Willie Shakespeare y terminaron casándose (el uno con el otro)
Durante la ceremonia se registraron enfrentamientos entre las barras bravas de los Montesco y los Capuleto, con un par de muertos y una decena de heridos, pero ese no es el tema de este relato.

Lo que interesa es contar, a grandes rasgos, lo que sucedió después:

Romeo dejó de tomar cerveza, aprendió a doblar sus camisas, jamás dejó calzoncillos ni medias tirados por allí, nunca echó panza y no tuvo ojos para otra mujer que no fuera su amada Julieta.

Ella afinó su cintura; se ocupó con alegría de las tareas del hogar; se acicaló cada día para recibirlo; estuvo dispuesta siempre para el amor (en doble turno: mediodía y noche) y no lo engaño jamás, ni siquiera con el pensamiento o flirteando por Internet.

En síntesis: se amaron por siempre.

RECORDATORIO:
Esto es un cuento.

PEQUEÑO DICCIONARIO RIOPLATENSE
(1) “Hacer la cama”: sinónimo de trampa, celada, arana, engaño.
(2) “Somos boleta”: nos van a matar.
(3) “Como el culo”: mal, pésimo.
(4) “Fiambre”: cadáver.