Estoy triste... muy triste,
la tristeza se me anuda en la garganta,
me humedece los ojos,
me corta la voz,
No me deja enfocar la mirada,
me oprime el alma.
Lo que más siento es soledad,
soledad cuando camino,
cuando me siento,
cuando como…
cuando logro comer... por un instante,
sin llorar... sin pensar... sin recordar...
No puedo alejarme de tu recuerdo,
veo tus ojos negros en la pared de mi cuarto,
siento tus pasos en el parquet,
te escucho mientras duermes… tranquilo… a mi lado.
A veces logro olvidarlo,
solo a veces…
el trabajo, los amigos, lo de afuera,
¡pero la casa!...
la casa se me hace grande,
el silencio se me hace grande,
tu ausencia se me hace grande.
Solo Dios sabe lo que sufriste,
yo ni me atrevo a imaginarlo,
solo deseo poder abrazarte otra vez,
tenerte en mis brazos, sentirte cerca.
Lo peor es que nadie lo entiende,
nadie escucha en mi silencio cuanto deseo que vuelvas,
con tus ojos negros,
tu cariño sincero,
con tus fiestas…
Y la soledad continua,
todo el silencio,
el vació inmenso…
el vació sin fin...
La tristeza me sube a la garganta,
me empaña los lentes,
me quiebra la voz. |