Giro fuera de ti sin alegría,
pues me alejo de ti y tú de mí,
ambos sabemos la propiedad
de tu conducta por ella los dos
jamás encontraremos un lugar
donde permanecer un solo instante
unidos, escapamos de nosotros.
Anhelo inalcanzable verticales
pendientes más motivos considero:
no molestar a nadie, ser útil,
la constancia me lleva por la vida,
me fija al suelo, mas los objetivos
se difuminan con lo más pequeño
entre risas y sueños tú me quieres.
Aprender, enseñar, crecer, vivir
con la paz instalada permanente,
queda sellada con proximidad
de corazones de almas gemelas,
sin turbulencias hasta la llamada,
y puedes quedar sin hacer más nada,
sé que te desespera por inquieta...
...estar desocupada, pero escucha,
una costumbre vieja sin cansancio,
¡Escúchatelo! siempre está contigo,
lo reconocerás por el contorno,
por la nitidez de sus mil aristas,
un corazón tan claro se te muestra...
...en tu interior sin dudas, sin conflictos,
allí quedan tus mimos a vecinos,
allí la letra sin nada de nada,
desnuda la verdad, ya sin las flores,
queda lo fuerte en el intento caro;
temperamento se pule con piedra,
mi letra inglesa ya no me abandona.
La llevo dentro, cubre mi inocencia,
no quiere abandonarme, permanece
terca como pequeña cara andante,
muestra la honestidad despabilada,
llena de gracias, sin orgullo, clara,
si se desplaza por el caminito,
sabemos donde está, se localiza.
En el instante neutro presentido
lo espero convencido, con destreza
me acompañan valientes, los marinos,
mi fuente de energía: la constancia,
Espíritu invisible verdadero;
que me dice adelante con dos pares
de leyes no escritas en panhispánico.
José Pómez
http://www.pomez.net
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