PRIMAVERA


Mayo, mes de las flores,
también florecen quebrantos,
mes de penas, de dolores
y de recuerdos ingratos.

Fue en mi delirio febril
que traté de recordar
tu figura tan gentil
con tu rostro angelical,

mas, tu imagen se apagaba
como la luz en la sombra
es mi mente quien te nombra
pues yo consciente no estaba.

Recuerdo en los días lluviosos,
mis ilusiones marchitas,
por el tiempo y la desdicha
bajo un cielo mentiroso.

Y el horizonte lejano,
mostrando el crepuscular,
me señalaba un naranjo
que hablaba de tu mirar,

de tu pelo tan bonito,
como esa tarde de invierno;
de tu boca de princesa
y tu ojos de lucero.

Anhelar es insensato
si es fugaz e inaccesible,
pensar es un desacato
si se piensa un imposible.

Si es un delirio pensarte
y el amarte una ilusión,
mi existencia es delirante
e iluso mi corazón.