Que será lo que tienen tus ojos que me enganchan a ellos como la magia más poderosa de la que no quiero escapar. Que será lo que tiene tu boca que me besa sin tocarme tan ardientemente que me quema las entrañas.
Que será lo que tiene tu piel que puedo sentirla rozando la mía y es tan suave y tan tibia que deseo arroparme con ella.
Qué será lo que escondes tú, mágica criatura, que estando tan lejos te siento tan cerca, estando afuera te siento dentro de mi...
Ven a mi, cielo, que esta noche te espero con mis brazos abiertos, con mis piernas tibias y mis labios húmedos para contarte un cuento. El cuento de dos que se creyeron uno.
Amame libremente, corazón, como yo te amo. Con toda la fuerza de que es capaz el alma, sin miedo, solo con infinita pasión. Pasión de amarte, pasión de darme segundo a segundo hasta que la última gota de mí viva en ti.
No llores mi vida, en este mismo instante estoy a tu lado, más cerca de lo que siempre he estado. Estréchame en tus brazos y sentirás crujir mis huesos contra ti. Soy real, soy tuya, siempre...
Mañana cuando salga el sol, el mismo de todos los días, tu y yo no seremos los mismos. Tu llevarás puesto mi olor y yo el tuyo. Y aunque nos separemos una vez más siempre tendremos que volver para intercambiar nuestros olores nuevamente... y algo más.

Eres la luz que brilla en mis ojos, el rojo de mis labios y la tersura de mi piel....